Este evento, que se ha consolidado como un destacado referente en la celebración de la gastronomía e identidad local, reunió a una multitud de participantes y asistentes que disfrutaron de una jornada llena de sabores y tradiciones.
“Estos platos representan todo lo que significa Andacollo, porque cada una de las preparaciones tenía parte de ese sabor, esa sazón que está relacionado a la tradición e historia de nuestra comuna”, indicó Rodolfo Roja, director de Desarrollo Comunitario.
El concurso destacó por la variedad y riqueza de los platos presentados, con participantes que ofrecieron sus mejores versiones de los clásicos de la cocina chilena. Entre los sabores que se pudieron degustar estaban: el cabrito con salsa de higo, empanada campestre, delicia campestre a las brasas, pie de mote con huesillo, locro, tabla típica andacollina, dulce trilogía tradicional y cazuela de gallina pícara.
El jurado, compuesto por el Chef internacional Álvaro del Fierro Chacón, Alba Guerrero (ganadora de la versión 2023) y Rodolfo Rojas, DIDECO de la Municipalidad de Andacollo, tuvo la difícil tarea de evaluar las creaciones culinarias.
Los premios fueron entregados a los más destacados en esta competencia culinaria:
- Tercer Lugar: Sasca Campusano con sus Delicias Campestres a la Brasa, un plato que capturó la esencia de la cocina tradicional chilena con una presentación excepcional.
- Segundo Lugar: Yanira Cortés, quien presentó su Tabla Típica Andacollina, una muestra de la diversidad y el sabor de los platos típicos de la región.
- Ganadora del Primer Lugar: Teresa Escobar, quien se llevó el primer premio con su Cazuela de Gallina Pícara, un plato que combinó magistralmente ingredientes locales con técnicas tradicionales, deleitando a los jueces y asistentes. “Le doy las gracias a todos, y quiero reconocer el entusiasmo de todos los participantes. No me esperaba ganar con mi plato que era una cazuela de gallina de campo por ser tan picante”, señaló la ganadora de este certamen 2024.
El X Concurso de Plato Típico Andacollino no solo celebró la rica tradición gastronómica de la comuna, sino que también promovió el sentido y la valorización de nuestras costumbres culinarias. Considerando la importancia de la cocina como parte fundamental de la identidad andacollina, este evento se consolida como un espacio para la preservación y difusión de nuestras raíces culturales.