Durante semanas, los profesionales y técnicos se pusieron a disposición de los sectores afectados, reforzando el trabajo realizado día a día por el personal local.
Cuando hace casi cuatro semanas el Ministerio de Salud, a través de su Departamento de Gestión del Riesgo en Emergencias y Desastres en Salud (DEGREYD), solicitó al Servicio de Salud Coquimbo el despliegue de los integrantes de sus Equipos Médicos de Emergencias (EMT) en apoyo a la zona por los incendios forestales, Sandra Valenzuela no dudó en sumarse a este contingente.
Ella es enfermera del Hospital de Andacollo y ya había participado en otros despliegues similares, por lo que en esta oportunidad fue una de las primeras en trasladarse al lugar junto al equipo de nuestro servicio, compuesto por un médico, dos enfermeras y dos Técnicos en Enfermería de Nivel Superior (TENS).
“Llegamos en la primera fase, donde recién comenzaba la remoción de escombros. Nos encontramos con familias que habían perdido todo y seguían en sus lugares en carpa, preocupados de limpiar y habilitar los espacios para la reconstrucción. Comenzamos a realizar nuestro trabajo en los sectores más afectados, como El Olivar, Villa Independencia, Campamento Manuel Bustos, Villa Hermosa, Pompeya Sur, entre otros. Lugares de difícil acceso donde se realizaba búsqueda, sitio por sitio, de alguna necesidad en salud, realizando curaciones y atenciones médicas”, comenta la profesional.
Pero Sandra no fue la única, Juan José Castro también se trasladó hasta la Región de Valparaíso para colaborar con apoyo médico y logístico. Él es enfermero del Servicio de Atención Médico de Urgencias (SAMU) de la Región de Coquimbo e integrante de los primeros Equipos Médicos de Emergencias que llegaron al sector. “El recibimiento fue bastante bueno, jamás tuvimos problemas con la gente, en todos lados nos recibieron de muy buena forma. Entendían que íbamos a ayudar, incluso muchas veces las personas no tenían problemas de salud, algunos solo tenían ganas de conversar, que les tocaran el hombro y pudieran desahogarse, porque estaban muy afectados por lo que pasó”, señala Juan José.
El enfermero del SAMU detalla además que los primeros días existía un temor de parte de las personas de abandonar sus espacios, es por eso que la mayor parte de las atenciones se realizaron en terreno, de forma más directa.
“Nosotros contabilizamos más de 390 atenciones en los 13 días de despliegue que tuvimos de forma efectiva, todas realizadas en terreno. Se hacían barridos de la zona para ir a atender a los pacientes, debido a que los mismos usuarios por temas de seguridad no dejaban sus terrenos. Se quedaban cuidando sus cosas porque nos contaban que, si salían de ahí, tenían miedo de que les tomaran el terreno o les robaran las pocas cosas que les habían quedado. Eso ya les había pasado, entonces se hizo una atención más en el lugar, se recorrió bastante”, añade.
Esto también lo destaca Sandra, quien detalla que “el trabajo en terreno nos exigía caminar muchos kilómetros por cerros, en subida y bajada, bajo un arduo sol, mucha tierra y ceniza, pero la buena recepción de la gente es gratificante en momentos en que lo prioritario es poder levantar sus hogares y reponerse de todo lo perdido”.
“SI BIEN UNO DEJA A LA FAMILIA, ES SIGNIFICATIVO PODER AYUDAR EN LA EMERGENCIA”
Los profesionales desplegados en la Región de Valparaíso son parte del listado nacional de EMT que el Departamento de Gestión de Riesgos, Emergencias y Desastres ha formado y capacitado en los últimos años a lo largo del país, con lo cual se dispone de más de 100 profesionales y técnicos para desarrollar este tipo de tareas en caso de emergencia.
Sandra y Juan José son parte de este equipo. Ella realizó su segundo despliegue este año, ya que antes había acudido a apoyar a la Región del Biobío debido a la emergencia por incendios forestales. “El año pasado me desplegaron a la localidad de Arauco, específicamente a Punta Lavapié y otros sectores cercanos. Si bien uno deja familia, posterga vacaciones y otros, para mí es significativo poder ayudar en la emergencia y aportar con mis conocimientos a esas familias que sufren estas catástrofes inconmensurables”, destaca Sandra.
En el caso del profesional del SAMU, esta tampoco es su primera experiencia. El año 2019 acudió a apoyar al sector de Huara producto de la emergencia ocasionada por las inundaciones asociadas al invierno altiplánico, estuvo en el Biobío poniéndose a disposición de los equipos que efectuaban labores producto de los incendios en la zona, y hace poco entregó su apoyo a la Región de O’Higgins producto de las inundaciones.
“No es mi primera experiencia, fue mi cuarto despliegue EMT, ya que el primero fue el 2019, pero el nivel de destrucción de este desastre en Viña fue el que visualmente se vio más afectado. Se perdieron muchas más vidas y era impactante ver la zona, como estaba toda destruida y la cantidad de fallecidos. Eso fue bastante impactante respecto a otros despliegues”, reflexiona Juan José.
COORDINACIÓN DESDE EL SAMU
Es importante destacar que tanto los Equipos de Apoyo a la Respuesta en Salud Mental (ARSAM), los Equipos Médicos de Emergencias (EMT) y la coordinación con la Célula de Información y Coordinación Médica (CICOM), son organizados desde el SAMU a través del Subdepartamento de Gestión de Emergencias y Desastres. Un rol articulador que fue clave para entregar la primera respuesta a la Región de Valparaíso.
“Para nosotros es súper importante disponer de Equipos Médicos de Emergencia, ya que son personal capacitado en este tipo de situaciones, lo cual es relevante porque en nuestro país nadie está exento de sufrir algo similar. Agradecemos el trabajo permanente que demostraron en terreno nuestros equipos, lo que da cuenta del gran compromiso que tienen con la salud de las personas y con el servicio público”, señaló Ingrid Olmos, enfermera coordinadora regional del SAMU.
Hasta la fecha, aún se mantiene un integrante del EMT en la zona afectada por los incendios, además de una funcionaria del Servicio de Salud Coquimbo que acudió a apoyar las labores logísticas, reforzando el trabajo realizado día a día por el personal local y contribuyendo así al enorme trabajo en red.
