Los ensayos de validación se desarrollan en la comuna del Monte Patria, sector El Palqui, donde, a partir de información satelital para estimar el nivel de desarrollo del cultivo y estaciones meteorológicas públicas, se establecen tasas de riego y se verifican los niveles productivos y de calidad alcanzados.
Una de las principales misiones del Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA Intihuasi, es cuidar y optimizar el uso de los recursos hídricos en la agricultura de la Región de Coquimbo, donde cada año la disponibilidad hídrica es menor.
Así mismo, el sector económico con mayores requerimientos de agua es la agricultura, pero, contradictoriamente, es la que tiene menos eficiencia a la hora de su uso.
Por estos motivos, el proyecto “Ajuste del coeficiente de cultivo satelital para el manejo preciso del riego en el cultivo de mandarinas en la zona centro norte de Chile“, apoyado por la Fundación para la Innovación Agraria – FIA, lleva dos temporadas validando un marco tecnológico y conceptual, que permite estimar de manera precisa las necesidades de riego del cultivo, con objeto de aumentar la eficiencia en el uso del agua y alcanzar altos niveles productivos y de calidad.
En una primera etapa, se comprobó que el marco tecnológico propuesto era posible de ser implementado de manera operativa en la zona de estudio y que permitía dar seguimiento al desarrollo del cultivo e indicar con precisión la cantidad de agua transpirada por las plantas.
“Para esto se estableció la tasa óptima de riego basada en información satelital acerca del nivel de desarrollo del cultivo (disponible en la Plataforma Agrícola Satelital PLAS) e información meteorológica pública (disponible en agrometeorologia.cl).
A partir de ambas fuentes de información, se estimó semanalmente las necesidades de riego del cultivo. Adicionalmente, se definieron tasas de riego experimentales que incluyeron sobre riego y déficit hídrico”, explicó Ariadna Veas, profesional de INIA Intihuasi.
De acuerdo a la profesional, uno de los principales resultados obtenidos en los ensayos es que “al regar con información obtenida desde imágenes satelitales, se alcanza un nivel productivo máximo del cultivo.
Así mismo, que al aportar más riego (práctica muy común en la agricultura regional) no se obtiene más rendimiento y sólo se gasta más agua y energía, disminuyendo la productividad del agua (kilos de fruta obtenido por litro de agua de riego aportado) y la rentabilidad del negocio.
De este modo, “regar con la recomendación de riego obtenida a partir de la información satelital, junto a la información de estaciones meteorológicas locales, se alcanza un rendimiento máximo y un uso eficiente de los recursos hídricos.
Por otro lado, se determinó que las tasas deficitarias de riego inducen menores rendimientos, menores calibres y bajas en la calidad del producto, lo cual confirma la necesidad de determinar claramente el agua disponible en cada predio y la superficie a regar de manera de mantener el cultivo en óptimos hídricos con objeto de alcanzar máximos rendimientos y calidad”.
Transferencia de una metodología de riego simple y precisa
La comprobación que el uso conjunto de información satelital disponible en la Plataforma PLAS y de estaciones meteorológicas, permite establecer una metodología simple para determinar las necesidades de riego del cultivo de mandarinos, es un gran avance para mejorar la eficiencia en el uso del agua en la agricultura de la Región de Coquimbo, así lo destacó Christián Álvarez, seremi de agricultura, quien valoró esta iniciativa.
“El uso de la tecnología, como los satélites y la información proveniente de estaciones meteorológicas, para determinar la cantidad exacta de agua que requiere una planta es tremendamente relevante para la eficiencia del uso de este recurso en la agricultura regional”.
Añadiendo que al validar esta tecnología se puede transferir este conocimiento para que esté al alcance de todos y asegurar la producción de alimentos para todas las chilenas y chilenos, “uno de los ejes principales del gobierno de nuestro presidente Boric es la seguridad alimentaria, con mayor eficiencia hídrica podemos producir alimentos en una zona golpeada por la sequía”.
Claudio Salas, director regional de INIA Intihuasi sostuvo que, “La Región de Coquimbo atraviesa por una crisis hídrica sin precedentes debido a la disminución sostenida de las precipitaciones, de ahí la relevancia de esta iniciativa que a través de la ciencia ha demostrado que es posible hacer un uso eficiente del recurso hídrico en la producción comercial de cítricos sin despreocupar la calidad de la fruta. Además, está en concordancia con los lineamientos emanados desde el MINAGRI al contribuir a la seguridad hídrica buscando el desarrollo sustentable del sector”.
Y es que uno de los principales problemas detectados en la agricultura regional es la falta de marcos conceptuales para determinar las necesidades de riego de los cultivos. Hoy en día, el desarrollo tecnológico permite poner en mano de los usuarios del agua, fuentes de información pública y confiable, que mejoran el manejo del riego.
Otra buena noticia es que esta metodología utilizada en estos trabajos puede ser utilizada en todos los cultivos y no solo en mandarinos. Trabajos anteriores en frutales como vides pisqueras, uva de mesa, nogales, paltos y en cultivos hortícolas como papas, lechugas, habas, entre otros, han permitido validar exitosamente las técnicas propuestas.
Para entregar los resultados y productos del proyecto, profesionales del INIA Intihuasi realizarán talleres de capacitaciones en el uso de información satelital, información meteorológica y en el uso de sensores de campo, para el manejo eficiente del riego.
Invitamos a los usuarios a contactar a ariadna.veas@inia.cl y/o claudio.balbontin@inia.cl para registrarse en dichos talleres. Cupos limitados.
