Este fenómeno se debe a que los cinturones de radiación de Van Allen se encuentran a menor distancia de la superficie terrestre generando que la radiación sea más alta que en otras regiones.
La Anomalía del Atlántico Sur o AAS, es un área donde la protección contra la radiación nociva del espacio disminuye a causa de la importante reducción de la intensidad del campo magnético de la Tierra, en comparación a otras latitudes similares.
El Dr. Pedro Vega Jorquera, académico del Departamento de Física de la Universidad de La Serena explica que “esto se debe a que el campo magnético de la tierra es dinámico. El modelo más simple que se propone es el de un dipolo magnético, sin embargo tiene una asimetría cilíndrica con una gran disminución en el Atlántico Sur, por ejemplo el valor del campo magnético debería ser del orden de 30000 nT, pero los registros son de 23000 nT (nanoTeslas).
Sobre su origen un factor importante son los procesos al interior de la Tierra, esto junto a otros procesos en constante investigación. En el Atlántico Sur esas líneas de igual intensidad de campo magnético están formando círculos, produciéndose un debilitamiento y una alta penetración de partículas de alta energía las cuales forman la banda interior de Van Allen”
Según científicos de la ULS, esta anomalía que atraviesa parte de América Latina se está profundizando y se encuentra en constante desplazamiento hacia el oeste, acercándose cada vez más a las regiones de Atacama y Coquimbo. Vemos además, que próximo a África se está generando una segunda Anomalía.
“Si en el último tiempo (la anomalía) ha tenido un gran desplazamiento, entonces uno puede pensar que de aquí a unos 5 años más va a ser un poquito más dramático. No debemos asustarnos tampoco, pero sí tener todas las precauciones posibles de que esa radiación puede afectar la vida en general” señala el Dr. Pedro Vega.
El Modelo Magnético Mundial, que ofrece una estimación de la actividad geomagnética de la tierra, respalda la declaración de los científicos mediante su último informe publicado el 1 de enero del 2023, con datos de una evaluación realizada en diciembre del 2021.
La información de la actividad geomagnética de la Tierra se obtiene a través de “capturas instantáneas” a lo largo del tiempo y deben ser actualizadas, aproximadamente, cada 5 años. Mediante el último reporte se afirma que el área afectada ha aumentado alrededor de un 5%
¿Qué daños puede causar?
Según los expertos, la anomalía podría causar daños a la vida en general puesto que en el área afectada disminuye la protección contra la radiación cósmica y partículas cargadas de alta energía, que afectarían, entre otras cosas, a nuestra piel (mediciones recientes, 2021, muestran que no tendrían un gran impacto sobre la vida; sin embargo, este resultado se obtuvo en el período de mínima actividad solar, es decir el flujo de partículas energéticas que inciden en la Tierra es mínimo).
Esto es una investigación en desarrollo, además de estudios sobre su impacto en instalaciones terrestres.
De acuerdo a lo anterior, la NASA afirma que la AAS no afectará aquí en la tierra, sino más bien a los satélites que atraviesen esta área, destruyendo sus computadoras u obstruyendo su recopilación de datos.
Es por esto que los operadores de satélites apagan regularmente sus componentes para no correr el riesgo de perder instrumentos claves. Finalmente debemos señalar que mucha investigación sobre la Anomalía Magnética del Atlántico Sur está en un creciente desarrollo.
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