A partir del 1 de agosto, se estima que 13 millones y medio de personas recibirán siete mil pesos como compensación por la colusión del papel higiénico. La Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones, CMPC, empresa chilena que controla el 76% del mercado, que se sometió a delación compensada, y la sueca SCA (Svenska Cellulosa Aktiebolaget) con el 24%, que pagó una multimillonaria multa, generaron el monto total que beneficiará a todos los mayores de 18 años al 31 de mayo de 2018, con Cédula de Identidad vigente, sean chilenos o extranjeros.
Las “7 lucas” han generado un genuino interés de la mayoría de las organizaciones que trabajan con los grupos más vulnerables para que se done este monto a causas sociales.
Hogar de Cristo es una de ellas e insta a quienes no necesitan imperiosamente esos siete mil pesos a que los aporten a la causa del padre Hurtado. Pero además, propone aprovechar esta oportunidad para darles a quienes viven la pobreza y la exclusión de manera extrema, las personas en situación de calle, todas las herramientas para que cobren la compensación como cualquier otro ciudadano.
Para ello, Hogar de Cristo ha aceptado la invitación del Servicio Nacional del Consumidor, SERNAC, de la región de Coquimbo para que nuestros acogidos de la Hospedería de Hombres de la ciudad sean considerados y puedan cobrar los 7 mil pesos. Así, el miércoles pasado, uno a uno los participantes de este programa social se fueron inscribiendo en el sitio micompensacion.cl.
El trámite es profundamente simbólico; reconoce que las personas que viven en calle son sujetos de derechos y ciudadanos de este país, que pese a vivir en condiciones de máxima adversidad y precariedad, presentan habilidades y capacidades valorables que, al ser reconocidas y fortalecidas, favorecen su integración social y la recuperación de sus vidas, sus afectos, sus hijos, sus familias.
Tal como hizo SERNAC Coquimbo, como Fundación esperamos que otras regiones se sumen y consideren a quienes viven a la intemperie como beneficiarios de esta compensación que corrige en parte una injusticia cometida contra todos los chilenos, incluidos los adultos mayores, quienes padecen discapacidad mental, las mujeres y todos los demás acogidos del Hogar de Cristo. El llamado es que nadie se quede sin sus siete lucas y a que el que pueda hacerlo las done, justamente para proteger a los más desprotegidos.
Gonzalo Cortés Urra
Director Ejecutivo Hogar de Cristo
Sede Coquimbo