CChC dio a conocer informe donde resalta necesidad de contar con proyectos que reduzcan la brecha en vialidad urbana, puertos, aeropuertos, entre otros.
La infraestructura es el motor de cualquier economía robusta y sana, así como una fuente de competitividad, crecimiento y bienestar social. De allí que la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) se preocupe por esta materia y elabore -desde el 2002 y cada dos años- el informe Infraestructura Crítica para el Desarrollo que identifica las principales deficiencias que presenta el país en 14 áreas estratégicas.
Lo cierto es que esta semana, la Gerencia de Estudios del gremio dio a conocer los nuevos resultados para el periodo 2018 – 2027 donde se estima que el país presenta una brecha de US$174.505 millones, es decir, un 15% más que la entrega anterior que comprendió el decenio 2016 – 2025 y que se ajustó a US$151.417 millones.
Entre las principales áreas que deben recibir recursos en los próximos años para promover el desarrollo, generar competitividad y asegurar la calidad de vida para los habitantes está la vialidad urbana, la que a nivel nacional requiere de US$60.776 millones. “Este tipo de antecedentes nos permiten aportar a las políticas públicas para asignar competitividad al país y generar un efecto directo en la calidad de vida de las personas, pues somos unos convencidos que la infraestructura es el principal vehículo para reducir las brechas sociales”, aseveró el vicepresidente nacional de CChC, Patricio Donoso.
En esa línea, el ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, quien fue invitado al lanzamiento del documento realizado en la sede central de la Cámara Chilena de la Construcción en Santiago, fue claro en su llamado a trabajar por una mejor infraestructura. “Una infraestructura deficiente equivale a una muralla arancelaria alta, lo que inhibe la competencia, ampara deficiencias y no ayuda a mejorar la cobertura social”, estableció el secretario de Estado.
A nivel local y en el ámbito de vialidad urbana, se determinó que la conurbación La Serena – Coquimbo presenta un déficit de US$1.255 millones, en tanto que la renovación de infraestructura se sitúa en US$1.458 millones y los proyectos de inversión estimados llegan a los US$804 millones. “Si queremos tener ciudades modernas, seguras, competitivas y sostenibles debemos poner acento a estas brechas, porque históricamente ha sido uno de los sectores que presenta mayor carencia en inversiones. Una infraestructura bien ejecutada eleva la productividad, genera cambios sociales y entrega atributos de bienestar social”, explicó el presidente de CChC La Serena, Sergio Quilodrán.
En vialidad interurbana se revisaron todos los proyectos viales, concesionados y no concesionados, que apuntan a mejorar la conectividad en las diferentes regiones, identificando necesidades nacionales por US$20.343 millones. Para el gerente de Estudios de la CChC y responsable del documento, Javier Hurtado, la clave está en la anticipación. “Este criterio permite anticipar adecuadamente cuándo se necesitará capacidad adicional y así iniciar los proceso correspondientes: Cambios en los contratos de concesión, nuevas licitaciones o contrataciones de obras con presupuesto fiscal”, precisó.
CAPACIDAD DE CARGA
Las condiciones geográficas de Chile dan pie para impulsar un desarrollo tanto por aire como por mar, no obstante, es aquí donde el estudio del gremio identificó carencias importantes. Una de ellas fue en puertos, donde deben materializarse obras por US$5.242 millones. “Chile no hace uso de su cabotaje, porque hay leyes que lo impiden (Nota: Sólo aquellos barcos con bandera nacional pueden transportar productos y personas entre puertos nacionales). Acá tenemos una oportunidad que debemos tomar para mejorar nuestra competitividad y productividad”, manifestó el gerente de Estudios CChC, Javier Hurtado.
En cuanto a estructura aérea, se vislumbran requerimientos por US$1.659 millones, resultando interesante el dato que muchas terminales están ad portas de llegar a su capacidad máxima, entre ellas La Florida en La Serena. “De acuerdo a este informe, el próximo año se llegará al límite de capacidad, por lo que tomamos a bien el anuncio que hizo el Presidente Piñera de relicitar nuestro aeropuerto”, expresó el presidente regional del gremio, Sergio Quilodrán.
Las otras áreas medidas fueron Telecomunicaciones donde se necesitan US$24.838 millones; Recursos Hídricos con US$18.254 millones; Educación con US$15.693 millones, Salud con US$10.448 millones; Energía con US$8.959 millones; Ferrocarriles con US$4.893 millones; Logística con US$1.785 millones; Cárceles con US$975 millones y Espacios Públicos con US$640 millones. También se consideró, por primera vez, la variable Resiliencia, donde de acuerdo al Banco Mundial, Chile debe inyectar US$2.400 millones para minimizar los impactos de los desastres naturales sobre las personas. No obstante, no se incorporó al balance final porque no tiene parangón con el informe anterior 2016 – 2025.
“La clave estará en el trabajo público – privado que generemos con las autoridades, de allí que reforzaremos las instancias sectoriales con los ministerios de Obras Públicas y Vivienda y Urbanismo, además de conformar una mesa multisectorial con el Gobierno Regional de Coquimbo que nos dé sustento para definir un plan de acción para los próximos años”, finalizó Quilodrán.