Los datos fueron entregados por la Unidad de Adopción de la Dirección Regional del Servicio Nacional de Menores. Además, aumentó la edad de los niños y niñas adoptados.
De acuerdo a la información entregada por el Departamento de Adopción del Servicio Nacional de Menores (Sename), durante el 2016 fueron adoptados a nivel nacional 473 niñas y niños, de los cuales el 84 por ciento permaneció en el país.
En tanto, en la Región de Coquimbo, el año pasado se concretaron 12 enlaces, todos ellos de carácter nacional. Si bien la cifra disminuyó en relación al 2015 (15 en total), la coordinadora de la Unidad de Adopción, Mary Álvarez, destaca que se están produciendo cambios importantes, ya que cada vez se adoptan niños más grandes. “Del total de enlaces concretados el año pasado, hubo tres niños y niñas sobre los 3 años, ya que los matrimonios están teniendo mayor apertura a adoptar niños más grandes. Esto tiene que ver con que las unidades de adopción estamos realizando charlas informativas y talleres de sensibilización, en donde se abordan los mitos o temores que existen y se van derribando. Los postulantes también asumen que es importante prepararse para ser padres adoptivos, que no basta solamente con las ganas de ser papás, sino que tienen que estar preparados para recibir a su hijo o hija en las mejores condiciones”, señaló Álvarez.
El promedio de espera de los postulantes, una vez que son declarados idóneos para adoptar, es de un año. Ese período se reduce si están dispuestos a adoptar un niño de 4 años o más, y aumenta para quienes desean adoptar a un lactante.
En cuanto a los costos del proceso, al realizar la postulación a través de la unidad de adopción del Sename en la Región de Coquimbo (ubicada en calle Colón 536, La Serena), solamente se deben pagar las evaluaciones sociales y psicológicas realizadas por profesionales externos, especialmente acreditados para estos fines. El costo de esas evaluaciones es de 13 UF (alrededor de 345 mil pesos).
Apoyo postadoptivo
El Sename está fomentando el apoyo postadoptivo, para que las familias enfrenten más confiadas la llegada de su hija o hijo, en especial cuando no son tan pequeños.
“Entendemos que el proceso no concluye cuando se le encuentra una familia al niño o niña, sino que recién comienza, por eso hay hitos importantes para el proceso de seguimiento que tienen que ver con visitas domiciliarias y talleres postadoptivos, en donde ponemos énfasis en la revelación de acuerdo a la edad del niño y si en algún momento se requiere algún tipo de intervención específica la idea es que siempre los estemos apoyando para que la adopción se dé de la mejor forma”, afirma Mary Álvarez.