El máximo tribunal ordenó bloquear 12 plataformas internacionales de apuestas online, lo que ha encendido las alarmas en la industria digital y entre los inversionistas que esperaban una regulación moderna del sector.
Una medida que sorprende al mercado
El 29 de septiembre, la Corte Suprema de Chile emitió una resolución que obliga a distintos proveedores de internet a bloquear el acceso a 12 sitios internacionales de apuestas en línea.
Aunque la decisión es limitada en alcance, ha generado una fuerte señal de inestabilidad y desconfianza en el mercado del juego online.
Entre las plataformas afectadas se encuentran Betano, Betway, Betcris, Coolbet y Betsson, marcas reconocidas que operan legalmente en otros países de la región.
El hecho de que el tribunal actúe de manera selectiva con empresas internacionales plantea dudas sobre la seguridad jurídica en un sector que mueve millones de dólares al año y que espera su formalización.
Contradicciones con la futura ley
El fallo judicial llega justo cuando el Congreso chileno analiza el proyecto de ley N°14838-03, destinado a regular y legalizar las apuestas online mediante licencias, impuestos y normas de protección al consumidor.
Sin embargo, la reciente resolución judicial parece ir en la dirección opuesta, dejando al sector nuevamente en un limbo legal.
Para muchos analistas, esta contradicción refleja la falta de coordinación entre las instituciones. Mientras el Parlamento intenta crear un marco claro y competitivo, las decisiones judiciales introducen más confusión y desalientan la inversión.
Polla Chilena, bajo la lupa
El caso vuelve a poner en el centro del debate a Polla Chilena de Beneficencia, la empresa estatal que por décadas ha mantenido una posición dominante en el mercado de los juegos de azar.
Polla se ha opuesto históricamente a la entrada de operadores internacionales y ha impulsado campañas para mantener el control del sector.
Aunque la resolución de la Corte Suprema se basa en argumentos legales, los resultados prácticos benefician directamente a Polla, que logra frenar la competencia y conservar su rol privilegiado.
Impacto económico y falta de claridad
La situación se agrava con el proyecto de ley N°15975-25, que propone sanciones penales para las plataformas “no autorizadas”, incluso antes de que exista un sistema de licencias.
Esto genera un vacío normativo que podría frenar inversiones, reducir la recaudación fiscal y empujar la actividad hacia la informalidad.
Compañías internacionales como Betsson, Betano, Coolbet y Latamwin observan con cautela lo que ocurre en Chile.
Los expertos advierten que el país corre el riesgo de perder competitividad en un sector que crece rápidamente en toda América Latina, donde las reglas son más claras y la industria contribuye de forma importante a las economías locales.
La decisión de la Corte Suprema deja en evidencia la urgente necesidad de una política coherente que permita equilibrar la protección del usuario, la competencia leal y la seguridad jurídica.
Hasta que el Congreso no apruebe una ley moderna y transparente, Chile seguirá atrapado en un modelo monopolizado que obstaculiza la innovación y limita las oportunidades de desarrollo digital.