Agua Grande, Almirante La Torre, Condoriaco y La Laja son algunos de los sectores que son visitados por los profesionales de Seguridad Ciudadana municipal.
Conocer las necesidades de todos los serenenses y tratar de resolver sus inquietudes en materia de seguridad es parte de la gestión del municipio de La Serena, liderado por la alcaldesa Daniela Norambuena, por ello, funcionarios de la Dirección de Seguridad Ciudadana municipal recorren cada uno de los sectores rurales más alejados de la ciudad.
“El municipio debe llegar a todos los vecinos y vecinas de la comuna, ese es uno de mis principales ejes de gestión. Debemos atender sobre todo sus necesidades en seguridad, por ello, hemos dado principal énfasis a los que están más alejados de los centros urbanos. Hoy estamos llegando con tres camionetas de seguridad, conociendo sus necesidades y tratando de resolverlas”, aseguró la alcaldesa Daniela Norambuena.
Una de las localidades rurales más alejadas en La Serena es La Laja, la que se ubica a más de 100 kilómetros, y para acceder a este lugar existe un camino de tierra que recorre varias quebradas y cerros, lo que demora cerca de tres horas de viaje para llegar a este sector. Por eso es importante mantener una constante comunicación con sus habitantes para conocer sus necesidades en materia de seguridad.
Johana Aguirre es vecina de Condoriaco y señala que “la labor que hacen ellos es muy buena. A uno le da esa seguridad que años atrás no había y la tranquilidad de que ellos están constantemente haciendo las rondas que les llamamos nosotros acá, a pesar de que aquí no hay muchos delitos y esperamos que no lleguen. Ha habido casos puntuales, pero esperemos que siga así o que nunca lleguen más allá”.
Una de las soluciones que ha aplicado el municipio ha sido la entrega de alarmas comunitarias, que les ha permitido a estos vecinos prevenir delitos.
“Es muy necesario porque a veces andan vehículos que uno no conoce a altas horas de la noche e igual, como somos pocos los que vivimos acá, es muy necesario que vengan a visitarnos. Nos instalaron alarmas y nos ha servido harto porque han venido autos y los han ahuyentado gracias a la alarma comunitaria. Para nosotros es muy importante que siempre estén recorriendo”, afirmó Sonia Cox, secretaria de la Junta de Vecinos de Condoriaco.
En esa misma línea, María Contreras, presidenta de la Junta de Vecinos y presidenta del Comité de Crianceros de Agua Grande, aseveró que las alarmas “nos han servido mucho. Nos hizo ese proyecto el municipio y ha servido harto porque, ante cualquier cosa que pase, ya los vecinos se avisan con eso y ahí ya no pasa a mayores. Siempre transitan personas o vehículos desconocidos. Como le dije antes, es muy bueno para el sector. Yo les doy un siete a las personas de seguridad municipal que siempre han estado presentes acá, no tan solo aquí, sino en la mayoría de los sectores que yo conozco”.
El gestor comunitario de seguridad de estos sectores rurales, Claudio Terán, explicó que “hacemos una asistencia vecinal tanto a las personas que viven en el sector como también a los dirigentes, de los cuales vemos cómo se encuentran ellos, sobre todo en el aspecto de su salud y en el aspecto de seguridad. Vemos qué situaciones han sucedido en el sector, si hay problemas de incivilidades de otras personas que llegan y vamos armando estrategias de seguridad con ellos para parar esa situación e ir viendo cómo pueden estar más protegidos”.
La desconexión en cuanto a la comunicación ha sido un problema con el sector rural, pero el municipio serenense ha dispuesto en cinco de estas localidades radios de VHF solares, las que permiten comunicarse en todo momento con los diferentes pueblos.
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