Una de las primeras acciones fue la entrega de un aporte social de 400 mil pesos para cada uno de ellos, con recursos municipales.
La Municipalidad de Illapel ha comenzado a trabajar en apoyo de los más de 200 comerciantes y emprendedores que perdieron su fuente laboral y económica tras los devastadores incendios que consumieron la totalidad de la Plaza de Abastos el pasado 13 y 14 de junio.
Además, se ha habilitado un sector provisorio para que los locatarios vuelvan a instalarse, mientras se trabaja en la demolición y habilitación de un sector en mejores condiciones para que puedan vender sus productos durante el tiempo que demore la reconstrucción de una nueva Plaza de Abastos.
Los comerciantes han expresado su agradecimiento por el apoyo recibido por parte de la Municipalidad. Juan Pinto, locatario, destacó la rapidez con la que se han abordado las soluciones por parte del Municipio y la labor del alcalde Denis Cortés Aguilera en la entrega de ayudas. Similar es la opinión de Senovia Araya, quien también es locataria de la extinta Plaza de Abastos, y se siente agradecida por el apoyo recibido y la unidad que ha surgido entre los comerciantes.
El alcalde de Illapel ha informado que se han realizado diversas gestiones con las autoridades y que se ha estado trabajando en distintos frentes para apoyar a los locatarios. La entrega de los 400 mil pesos por locatario es una ayuda social que les permitirá pagar las cuentas básicas, pero se necesita seguir trabajando para conseguir capital de trabajo y que puedan volverse a levantar.
En una primera etapa, se ha dispuesto de un lugar provisorio para que los locatarios vuelvan a instalarse, a la espera de contar con un lugar que reúna las condiciones para que estén más cómodos. La locataria Silvia Olivares ha destacado la importancia de este apoyo para las familias de comerciantes que quedaron a brazos cruzados tras la catástrofe. Los comerciantes invitan a toda la comunidad de Illapel a visitarlos y apoyarlos en su nuevo lugar de venta.