La Policía de Investigaciones de Chile (PDI) de la Región de Coquimbo conmemoró su 92° aniversario institucional con una solemne Eucaristía en la Catedral de La Serena. La emotiva ceremonia, que marcó el inicio de las celebraciones, fue presidida por el obispo auxiliar de La Serena, Mons. Enrique Balzán Caruana, y contó con la presencia de destacadas autoridades regionales.
Entre los asistentes se encontraban el Delegado Presidencial, Galo Luna Penna, el Prefecto Inspector de la PDI, Ernesto León Bórquez, junto a representantes de las Fuerzas Armadas, Carabineros e instituciones civiles, quienes se unieron para celebrar este hito institucional.
Un Llamado a la Fe y al Servicio Comunitario
Durante su homilía, Mons. Balzán agradeció a la PDI por iniciar sus festividades en la “Casa de Dios”, enfatizando la importancia de encomendar a la divinidad cada acción, familia e institución. “Damos gracias por su servicio, por su entrega y por el bien que realizan en nuestra Región. Que el Señor los acompañe siempre en su labor”, expresó el obispo, instando a los presentes a renovar su compromiso con la comunidad bajo la guía de la Palabra de Dios.
La liturgia, organizada por un equipo de funcionarios de la PDI, incluyó oraciones especiales por la paz mundial, la seguridad nacional y el bienestar de quienes integran la institución y sus familias. Un momento significativo fue la presentación de símbolos distintivos de la PDI, como la bandera, la placa institucional y la “luz”, un elemento que evoca a Cristo como guía del servicio policial.
Compromiso con la Justicia y la Confianza Ciudadana
El Prefecto Inspector Ernesto León Bórquez, Jefe de la Región Policial de Coquimbo, expresó su profundo agradecimiento a la Iglesia por acoger esta instancia. “Trabajamos por tener un país más justo, donde cada ciudadano pueda llegar sano y salvo a su hogar”, afirmó León Bórquez.
Además, el Prefecto Inspector hizo un llamado a la sociedad a confiar en la labor policial: “Invitamos a la sociedad a confiar en su policía, porque cada esfuerzo y cada paso que damos, lo hacemos encomendados a Dios, con la esperanza de contribuir al bienestar y la justicia de todos los ciudadanos”.
La celebración dejó una profunda huella en los funcionarios y sus familias, quienes se sintieron fortalecidos en su vocación de servicio, especialmente en el desafiante contexto social actual. Este evento refuerza el vínculo entre la PDI y la comunidad de Coquimbo, destacando el compromiso de la institución con la seguridad y la fe.
