La Municipalidad de La Serena y el Instituto Nacional de Deportes (IND) organizaron una corrida familiar inclusiva en la Avenida del Mar, en el marco del 480º aniversario de la capital regional. La iniciativa, que se llevó a cabo la mañana del domingo 25 de agosto, contó con las categorías 2K y 5K y destacó por su enfoque en la inclusión y la participación de personas con diversas capacidades.
Claudia Craig cruzó la meta junto a su padre Rubén, quien se movilizó en silla de ruedas. Claudia expresó su agradecimiento por la oportunidad de demostrar que los problemas de movilidad no son un impedimento para realizar deporte. “Siempre estuve en los 5K con mis amigos, pero este año quise venir con mi papá, que si bien tiene dificultades de movilidad, le gusta mucho este tipo de actividades. Lo incluí para que participara también y estuvo bastante animado”, comentó Claudia.
Claudia considera que el concepto de inclusión en este tipo de eventos es clave y necesario. “Lo encontré muy bonito porque mi padre no podía venir a estas actividades, pero ahora tuvo el espacio”, subrayó.
El alcalde de La Serena, Roberto Jacob, destacó el interés de los participantes por hacer deporte y el carácter solidario de la iniciativa. “Es tremendamente dignificante estar en una prueba inclusiva y donde este tipo de personas puedan participar. El entusiasmo que se ve en la partida es tremendo y se transforma en la oportunidad para ellos de demostrar que también son capaces”, profundizó la autoridad, quien compartió con el concejal Félix Velasco, quien llegó a correr junto a su familia.
Jonathan Pino, director del IND, resaltó que desde un principio el objetivo fue que la corrida tuviese un sello familiar y, sobre todo, inclusivo. “Los resultados estuvieron a la vista, sobre todo por la alta participación, donde llegaron alrededor de 600 personas”, subrayó.
Desafiando la Adversidad
Mauricio Cortés, quien posee dificultades auditivas, participó feliz en la prueba y valoró la oportunidad de mostrar sus capacidades en la modalidad 2K. “Es muy especial para mí porque antes de tener problemas físicos era atleta, pero, a pesar de las complicaciones, siempre me ha interesado participar en actividades deportivas como esta y ahora estoy representando a la agrupación de sordos y lo agradezco”, sentenció.
El testimonio de Omar Ramírez (41) también es reconfortante. Admitió que además de salir de lo cotidiano, la corrida le permitió demostrar que uno también tiene una vida independiente, puede ser autónomo y no depender de otras personas para hacer ejercicio y mantener el cuerpo activo. “Hace ocho años tuve un accidente que me dejó parapléjico, pero la adquisición de una bicicleta especial me permite desarrollar una vida normal”, explicó.
Omar relató que se inspiró en el caso de una persona de Temuco que sufrió la misma afección y fabricó un “hamcycle”. “Salí adelante con el apoyo de mi familia, por lo que no me podía quedar postrado en una cama si tenía la posibilidad de ser activo”, admitió.
Más que sueños, Omar se ha trazado metas y objetivos. “Más que como deporte competitivo, veo esto como un ejercicio y la forma de seguir apoyando a mi familia”, reiteró.
La corrida familiar inclusiva en la Avenida del Mar no solo celebró el aniversario de La Serena, sino que también destacó la importancia de la inclusión y la participación de todos en actividades deportivas, demostrando que las capacidades diferentes no son un impedimento para alcanzar grandes logros.