Una reunión con familiares de doce víctimas ejecutadas por la denominada “Caravana de la Muerte” en la ciudad de La Serena y de otras tres víctimas de violaciones a los derechos humanos en la región de Coquimbo, sostuvo el ministro encargado de la Corte de Apelaciones serenense, Sergio Troncoso Espinoza.
En el encuentro, en el que también participó la coordinadora nacional de la Unidad de Derechos Humanos del Servicio Médico Legal (SML) , Alejandra Didier Pérez; el profesional genetista, Raúl González Khoter, y el encargado del Programa de Derechos Humanos de la Seremi de Justicia, Álvaro Aburto Guerrero, se entregaron los resultados de las últimas pericias efectuadas por el SML ante incongruencias y sospechas de errores en la identificación de los cuerpos que fueron entregados a los familiares en 1998.
“Se conversó con los familiares respecto del curso de acción a seguir y se establecieron líneas paralelas y alternativas para continuar trabajando en obtener mayor verdad. Hubo una gran apertura y generosidad de parte de ellos para permitir eventuales nuevos exámenes a los restos que les fueron entregados en 1998 e incluso puede que sea necesario realizar algunas exhumaciones, lo que está en estudio”, manifestó el ministro.
Ante ello se trabaja en un catastro de la ubicación de las distintas víctimas para establecer las condiciones en que se encuentran sus restos y poder determinar la necesidad de toma de muestras ante una eventual exhumación, que busca contar en todos los casos con el consentimiento del entorno familiar.
Previo a la reunión con familiares, el ministro Troncoso sostuvo un encuentro con el SML para revisar los antecedentes. “En parte para ver qué es lo que se iba a plantear como propuesta al grupo de familiares de los ejecutados del episodio Caravana y también respecto de otras causas que se llevan adelante por la unidad de Derechos Humanos de esta Corte de Apelaciones, en que igualmente existen diligencias pendientes relacionadas con el plan de búsqueda”, señaló.
Al respecto, los familiares de las víctimas agradecieron la instancia y la información entregada de primera fuente, así como las futuras diligencias que se desarrollarán. “Fue una gran reunión para nosotros por el hecho de que como familiares no la estamos pasando bien, es un tema que nuevamente reabrió las heridas de 25, 26 años atrás y sentimos mucho dolor físico, emocional, mental; pero quedamos muy conformes con el ministro porque sentimos muy fuerte que él está con nosotros y él quiere que esto sea en un corto plazo”, manifestó Eduardo Cortés Barraza, hijo de una de las víctimas.
Asimismo, el abogado del Programa de Derechos Humanos destacó la generosidad de las familias de las víctimas para colaborar con el proceso. “Como programa creemos que este es un hito muy importante para avanzar en el esclarecimiento del destino final de las víctimas de desaparición forzada de la región de Coquimbo. Aún queda mucho por hacer, sin embargo, hoy existe la experiencia técnica y los medios necesarios para afrontar la tarea. Esperemos que al finalizar el proceso podamos hallar a quienes nos faltan y dar el descanso tan buscado, para quienes han transitado el largo duelo de la ausencia de sus familiares”, concluyó.