Un grupo de 34 agricultores de la comuna de Salamanca, región de Coquimbo, se vieron beneficiados por el Programa de Difusión Tecnológica Hídrica (PDT), “Transferencia de tecnologías y manejos para la optimización y gestión del recurso hídrico intra y extra predial para los regantes del Río Choapa”.
El trabajo se desarrolló en terreno durante más de un año y permitió brindar asistencia técnica en materia de riego a productores de vides y nogales. La iniciativa se llevó a cabo en tres etapas: un diagnóstico de los sistemas de riego de los agricultores, asesoría específica por parte de un equipo de profesionales y una ronda de talleres para disminuir las brechas detectadas en mantención y operación de equipos de riego, manejo de humedad a nivel de huertos a través de la tecnología de sensores, y definición de la demanda hídrica acorde a la disponibilidad de agua del territorio.
Giovanni Lobos, investigador de INIA y director del proyecto, destacó que “transferir conocimientos y tecnologías para la optimización de recursos hídricos intra y extra predial fue uno de los objetivos. Además, establecimos unidades demostrativas en dos predios, donde incorporamos tecnologías diferentes para la optimización del recurso hídrico; riego subterráneo, uso de mulch, monitoreo de suelo con sensores de capacitancia y uso de Plataforma Agrícola Satelital PLAS”.
Julio Escudero, productor de nogales desde hace once años en la localidad de Cancha Brava, fue uno de los beneficiarios del PDT y destacó los beneficios de la iniciativa: “para los creyentes esto fue caído del cielo, llegó esta propuesta del INIA para hacer el esquema de riego en donde venían incluido análisis foliar, apoyo técnico, recomendaciones que nacían desde los análisis, y así logré cosechar este año, a pesar de que pensé que no iba a poder cosechar y tuve buenos resultados”.
La gobernadora de la Región de Coquimbo, Krist Naranjo, resaltó que “con la ejecución de este proyecto estamos fortaleciendo las capacidades del territorio en directo apoyo a las personas que viven en la provincia del Choapa, impulsando la colaboración entre los actores públicos y privados, e incorporando innovación para una zona que ha estado permanentemente sometida a escenarios de escasez hídrica”.
Claudio Balbontín, director regional de INIA Intihuasi, destacó los beneficios del programa para los agricultores: “entrega herramientas tecnológicas para la definición de necesidades de riego, marcos conceptuales para definir cómo se utilizan bien los equipos de riego y algunos aspectos que tienen que ver con marcos climáticos, eficiencia hídrica, niveles productivos, manejo agronómico de los cultivos, todo con una orientación hacia la eficiencia hídrica. Este tipo de programa entrega herramientas a los agricultores para estar preparados para el futuro”.
Andrés Zurita, director regional de CORFO, detalló que “este programa es muy interesante, porque ha hecho un trabajo sistemático con cada uno de los productores y el análisis de las brechas que tienen respecto al manejo del agua intra y extra predial, lo cual ha permitido que en conjunto se vayan buscando distintas alternativas de gestión, para el mejor uso del recurso hídrico incorporando tecnologías y capacitación”.
Eduardo Gómez, gerente de la Fundación Minera Los Pelambres, explicó que “Minera Los Pelambres a través de su Fundación en el territorio de la Provincia del Choapa, cumple un rol fundamental de fomentar la gestión hídrica y para esto es muy importante interactuar con actores públicos, la academia y los usuarios del consumo de agua, tanto de consumo de agua o de riego quienes tienen incidencia en el territorio. Dado eso nos podemos articular con INIA y Corfo y buscar instancias de perfeccionamiento y entrega de conocimientos, en este caso a los regantes para que hagan un uso más eficiente del agua, ese es el concepto que nos mueve como compañía”.
Ricardo Cortés, presidente de la Junta de Vigilancia del Río Choapa, sostuvo que “el balance es bastante positivo en terreno, los talleres, participación y diagnósticos. Hemos visto que ha sido un impacto positivo para cada uno de los agricultores. Es un beneficio identificar en qué condiciones estamos y en base a eso se desarrolló el programa. Este programa ha sido un beneficio para la agricultura más allá de los beneficiarios directos ha habido beneficiarios indirectos también quienes han asistido”.
