Impacto ha generado en la comunas de Combarbalá y Calama, el asesinato de la defensora ambiental y del agua, Javiera Rojas Veas de 42 años. En circunstancias que aún no son aclaradas, la dirigenta social fue encontrada muerta, amarrada de pies y manos en una casa abandonada en Calama. Diputado Núñez sostiene que todo indica que es un femicidio.
La PDI (BICRIM de Calama) y la Fiscalía están resolviendo el puzzle y ya se detuvieron a dos hombres implicados en el suceso. Se corroboró que el cuerpo de la dirigenta tenía lesiones atribuibles a terceras personas.
El diputado Daniel Núñez trabajó con ella directamente en Combarbalá. “Estoy indignado, nos enteramos de este asesinato. Una activista medioambiental, defensora del agua, contra las termoeléctricas, yo la conocí allá, trabajó siempre con nosotros. Estamos impactados. Todo indica que es un caso de femicidio”.
El senador electo agregó que “no queremos que nunca más, ninguna mujer en Chile sea asesinada y menos aún en situaciones tan dolorosas, en extrañas circunstancias como éstas. Pedimos un pronta investigación, que la Fiscalía actúe con mucha acuciosidad y le enviamos las condolencias a su familia”.
Leticia Ramírez, presidenta del Consejo Regional Campesino, también tuvo una estrecha relación con Javiera. “Yo conozco a Javiera desde que se inició en sus luchas contra la termoeléctrica, debe ser en 2016. Su activismo la lleva a participar en la Mesa de Desarrollo Rural y ahí comenzamos a trabajar juntas, en el embalse de la Tranca que pretendían inundar al pueblo del Durazno, robo del agua, del embalse de Valle Hermoso, Plan Regulador del Limarí y suma y sigue, pasamos semanas con ella leyendo para tener las observaciones”.
Ramírez asegura que este hecho es un femicidio. “Si bien no ha habido mayor información al respecto, sobre si es femicidio o no, en forma oficial, de suicidio esto no tiene absolutamente nada, porque ella estaba amarrada…exigimos justicia”.
Javiera se fue en 2019 a Calama, a cuidar a sus padres que estaban delicados de salud.