En el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de La Serena comenzó el juicio oral en contra del subteniente de Carabineros K.A.B.R., acusado por el Ministerio Público como autor de los delitos de homicidio consumado y homicidio frustrado. Ilícitos perpetrados en febrero de 2019, en la comuna de Andacollo.
En la primera jornada del juicio (causa rol 73-2020), el tribunal –integrado por las magistradas Victoria Gallardo Labraña (presidenta), Jimena Pérez Pinto (redactora) y María Inés Devoto Torres– leyó la acusación fiscal que sindica a K.A.B.R como autor de los ilícitos cometidos durante un procedimiento de persecución de un vehículo que habría evadió un control policial.
Según el ente persecutor, aproximadamente a las 23 horas del 16 de febrero de 2019, el acusado ejercía labores preventivas en la vía pública de la ciudad de Andacollo, en su condición de subteniente de Carabineros, a cargo de la patrulla que circulaba a bordo del furgón policial PPU Z-7440, sentado en el asiento del copiloto, acompañado como conductor por el cabo primero Christian Vera Sánchez, mientras que en el habitáculo trasero iban el cabo segundo Héctor Miranda Garrido y el carabinero Guillermo Godoy Rojas. En los momentos en que el vehículo policial circulaba en dirección norte por calle Matadero al llegar a la intersección con calle Colón, sus ocupantes se percataron que se desplazaba en sentido contrario el automóvil Volkswagen, modelo Golf A4 1.6, color plateado metálico, PPU ZX.6746, cuyo conductor, José Manuel Alejandro Rivera Pizarro, a fin de evitar su fiscalización lo condujo por calle Colón hacia el oriente.
Ante dicha maniobra, el acusado le “(…) ordenó al piloto del vehículo policial efectuar un seguimiento del vehículo conducido por Rivera Pizarro, por los caminos de tierra aledaños al sector de La Coipa hasta llegar a la calle asfaltada El Toro, siguiendo por esta vía hacia el oriente. Al llegar al cruce con avenida Chepiquilla, el seguimiento continuó en dirección hacia el sur. Luego de hacer uso de sirenas, aparato sonoro y voceo por parte de Carabineros, para que el vehículo pudiera ser fiscalizado, tras avanzar cerca de 400 metros por esta última vía, el imputado, haciendo uso de su arma de servicio, pistola marca Taurus 9 mm, modelo PT 917 C, número de serie TEZ03361, disparó desde el furgón policial en dirección al Volkswagen Golf, un vehículo liviano, ocupado por personas, de modo certero, a corta distancia, con conocimiento de sus habilidades como tirador y del poder de fuego del arma utilizada, atendido el calibre 9 milímetros y naturaleza del proyectil encamisado”, agrega la acusación fiscal.
“El primer impacto alcanzó el parachoques trasero derecho. Luego de ello, disparó contra el parabrisas trasero, proyectándose la munición hacia el asiento del piloto, don José Manuel Alejandro Rivera Pizarro, traspasando la butaca de su asiento, lo que le provocó una herida de proyectil balístico, anterior y posterior de tórax, con salida de proyectil, de mediana gravedad, que tardará en sanar entre 15 a 20 días, sin perjuicio de eventuales secuelas. Luego, sin que hayan mediado unos instantes, en las mismas condiciones antes referidas, el imputado decidió disparar una tercera munición, cuyo proyectil balístico traspasó el parabrisas trasero, impactó la cabecera del asiento del copiloto, para alojarse en definitiva en la nuca de su ocupante, doña Tania Larisa Morgado Cortés, lo que le causó una herida de bala cervical, de la tercera vértebra, sin salida de proyectil, falleciendo por encefalopatía hipóxica, el día 20 de febrero de 2019 a las 17.48 horas, en el Hospital de Coquimbo. Al momento de los disparos, el conductor del vehículo o sus ocupantes no ejecutaban acto directo alguno de ataque contra Carabineros de servicio o terceros, que justificase el uso de armas de fuego en un procedimiento de fiscalización de tránsito” concluye.
Tras la lectura de la acusación, el Ministerio Público, los querellantes y la defensa realizaron los respectivos alegatos de apertura del juicio.
La audiencia continuará mañana, martes 3, con la presentación de los primeros testigos, peritos y demás medios de prueba por parte del ente persecutor. Luego será el turno de los querellantes y la defensa. El proceso está programado que se extienda por dos semanas.