Durante el operativo se informó, además, sobre la nueva ordenanza municipal que multará a quienes compren a vendedores ilegales.
Sonia Rojas trabaja hace 20 años vendiendo frutos confitados, chocolates y otros alimentos en la calle. Se ubica fuera del Banco Estado, por calle Balmaceda y comenta que desde el comienzo ha mantenido su permiso, el cual le fue otorgado por la discapacidad de su marido. “Solo tengo que estar con la credencial, porque cuando vengan los inspectores me la van a pedir. Siempre he trabajado tranquila y he tenido permiso, tengo que pagar un mínimo de impuesto y está bien, es lo que corresponde para trabajar tranquila, cuento con mi patente y la pago todos los meses”, indicó.
Ella fue parte del nuevo operativo de seguridad llevado a cabo por inspectores municipales junto a personal de Servicio de Impuestos Internos, Servicio de Salud y Carabineros, donde además se informó a la comunidad sobre la ordenanza que comenzará a regir a partir del 30 de octubre, que sancionará a las personas que compren en el comercio ilegal. “La ordenanza ya se aprobó y durante esta marcha blanca comunicamos a la comunidad en qué consiste la normativa, lo hacemos también a través de los parlantes que están insertos en las cámaras de vigilancia y les anunciamos que prontamente se pondrá en marcha esta medida”, señaló Gonzalo Arceu, encargado de la unidad de Seguridad Ciudadana, quien puntualizó que en la instancia también se fiscalizó a los vendedores que trabajan de forma irregular.
Para el alcalde Roberto Jacob, el operativo forma parte de las medidas que buscan reordenar el comercio en la vía pública, debido a las constantes molestias expresadas por la comunidad. “Estamos aumentando la dotación de inspectores, pondremos 8 más y estos días deberían entrar 4 más que estarán en el sector céntrico para hacer cumplir esta nueva ordenanza que tenemos y a fin de octubre termina la marcha blanca, terminando esto la gente sabe a lo que se expone”, enfatizó.
De acuerdo a los datos entregados por el municipio, hay un listado de 58 personas autorizadas para vender en la vía pública, quienes deben portar sus credenciales con nombre, rut y sector de trabajo. “Estoy contenta porque me dieron la posibilidad de tener mi negocio, tengo mi permiso y ahora nos dijeron que fuéramos a impuestos internos para no tener problemas, me gustaría que esto se arreglara para que la ciudad se vea mejor y no hayan este tipo de problemas en las calles”, expresó Ana Contreras.
Mientras dure la marcha blanca, continuarán los operativos de control al comercio ambulante ilegal y a aquellos que compren en él, cursando partes de cortesía hasta fines de octubre.