El desafío es su integración hacia otros sectores productivos relevantes para la economía regional como el turismo
Cerca de un año las y los empresarios panificadores de La Serena y Coquimbo fueron parte de un intenso programa que permitió que el grupo adoptara nuevas tecnologías y conocimientos con el propósito de trasformar el tradicional oficio en un panadería inteligente sin descuidar el sabor y el sello patimonial de sus productos.
Uso de energía fotovoltaica, quemadores eficientes con baja emsión de gas, uso de materias primas menos refinadas, formación en tendencias de panaderías saludables fueron parte de los tópicos adquiridos por las y los panaderos que no solo mejorarán su producción amigable con el medio ambiente, sino que además optimizarán su presupuesto.
El Programa de Difusión Tecnológica de CORFO en la región de Coquimbo, ejecutado por la Consultora Innovativa Desarrollo Empresarial constituye una experiencia única e innovadora en este sector productivo, proyectándose futuras intervenciones de este tipo en la zona. “En el marco de la política nacional de innovación a través de INOVA Chile, en una de sus líneas de transferenica tecnológica buscamos aportar con herramientas a la producción de esta tradicional industria y que está arraigada a las y los chilenos. Logramos traspasar conocimientos experiencias y tecnologías para entregar un producto elaborado acorde a los parámetros de elaboración como también de la gestión posterior de las empresas panificadoras”, sostuvo el director regional de CORFO, Gregorio Rodriguez.
En tanto, Francisco Jimenez, ejecutivo de la agencia gubernamental señaló que junto con incorporar nuevas tecnologias y conocimientos, las y los empresarios lograron mejorar su desempeño y competitividad. “El principal impacto fue formar una cooperativa entre pandificadores para postular a otros proyectos de inversión que profesionalice aún más el sector panadero”, dijo.
En total fueron 30 panaderías que desde hace un año confiaron en esta experiencia apostando a elevar su estándar como una alternativa válida de alimentación saludable, sustentable y con nuevos y mejorados productos. “Poder disminuir costos en electricidad nos ayuda bastante, es un ahorro que a futuro nos puede convenir, sumado a la instacia de conocernos, y formar una Asociación Gremial en la región que no había hace tiempo. Agradecemos la disposición de todas las panaderías que participamos en pos de mejorar nuesta producción en calidad e innovación”, señaló Alejandra Aróstica de panadería Paicopigue de La Serena.
El representante de la tradicional panadería Pan de Rey, agregó que la formación entregada en estos doce meses abrió nuevas expectativas de negocio para las y los empresarios del rubro. “Nos dimos cuenta que había mercado para diferentes productos y tendencias que anteriormente en nuestra zona de confort no estábamos analizando y lo mas importante que rescatamos fue conocernos, hacer redes, valorar la ayuda que de forma natural, nos fuimos dando”, expresó.
Desde la Panificadora Peñailillo, María Carolina Peñailillo destacó esta iniciatva que – a su juicio- tiene importantes proyecciones. “Ahora hay una retroalimentación, hemos visto nuevas tecnologías, nuevos procesos, lo que es muy positvo”, manifestó.
Experiencia pionera
Mejorar prácticas de producción, la rentabilidad y promover la asociatividad fueron los factores claves en el éxito de este programa, lo que fue altamente valorado por las autoridades económicas de la región de Coquimbo y por quienes ejecutaron el proyecto.”Hemos llegado al fin de este proceso con un buen término, teníamos un gran desafio y lo hemos cumplido. Coincidmos con CORFO que desde hace años no se había trabajado con el rubro de la panadería y hoy este grupo está aprovechando esta oportunidad que les abre un campo de posibilidades que permitirá visualizar un horizonte de oportunidades para el mejoramiento de su negocio”, sostuvo Washington Cárdenas, Director de Desarrollo de Innovativa Desarrollo Empresarial.