Cada minuto que pasa, el agua se transforma es un bien más preciado, porque escasea, ya sea por el cambio climático, el robo de agua o tomas ilegales.
El ejemplo más crudo es en la Laguna de Aculeo, zona turística por excelencia, en que hace algunos años marcaba hasta 2 metros y medio de profundidad, hoy, es un desierto, provocado por robos de agua. Situación muy parecida ocurre en Combarbalá con este calificado “robo de agua” por parte de la Agroindustria “Las Tinajas”, que realizaron 3 pozos, ilegales, afectando a los APR colindantes y que comienzan a sentir aun más la escasez.
Hace poco tiempo, este robo de agua fue denunciado por parte de los vecinos y apoyados por el diputado Daniel Núñez, sin embargo, la DGA autorizó regularizar 2 de estos 3 pozos. Mientras el ministro Juan Andrés Fontaine del MOP, hace frente al desastre de la Laguna Aculeo, acusando robos de agua, redoblando presencia de fiscalizadores en ese lugar, en nuestra zona, hay pocos fiscalizadores de la DGA y no toman en cuenta la dramática situación de la ruralidad, en que el agua es un recurso escaso y del cual, viven muchas familias.
Los vecinos y el diputado Núñez, se reunieron con el director regional de la DGA, Carlos Galleguillos, sin embargo, no terminaron conformes debido a esta autorización y ya advirtieron que interpondrán un Recurso de Reconsideración para que esta empresa sea investigada y que exista sanción por estos robos en un lugar de escasez hídrica.
“Quiero denunciar que la DGA ha hecho entrega, a mi juicio en forma irregular, una autorización de extracción de agua de pozos profundos a la Agroindustria Las Tinajas de Combarbalá. Es muy extraño que se haya autorizado esta extracción cuando nosotros denunciamos esta situación y hay mucho daño en contra de los vecinos. Esto agrava el consumo humano de las personas en ese lugar”, dijo el diputado Núñez.
El legislador agregó que “hay un mal uso del decreto de escasez por parte de la DGA que está permitiendo que empresas agroindustriales realicen pozos profundos, soliciten permisos y se siga generando plantaciones de cítricos, paltas, lo que genera una mayor escasez del recurso vital. Yo apoyaré a todos los vecinos y solicitaremos una reconsideración a la DGA por esta autorización, enviaré también un oficio a la DGA a nivel nacional para que se investigue este tema. Llegaré hasta las últimas consecuencias”.
De hecho, los vecinos, han sentido la merma que les produce esta falta de agua. “Hemos vivido de toda la vida en ese lugar, tenemos esos pozos para nuestro consumo, huertos familiares, árboles autóctonos. Nos está afectando, porque tenemos poca agua y más ahora que están legales, ellos están a unos 100 metros de nuestras casas. Me parece muy negativo que la DGA le haya dado permiso, porque no investigaron el entorno, a nosotros y ver qué significaba esa explotación del agua”.
Leticia Ramírez, presidenta del Consejo Regional Campesino afirmó que “es muy importante para nosotros la Agricultura Familiar Campesina, porque es el sustento de nuestro territorio. Si la autoridad nos entrega esta última posibilidad de pelear el agua a un industrial, lo haremos, porque los pozos han disminuido, está afectando a los APR y a los vecinos que producen alimentos”.
La dirigenta social subrayó que “la proyección que tienen los agricultores pequeños es seguir plantando. Lo que queremos es que se reconozca que existe una escasez en ese sector, porque es cierto, y priorizar los usos, como la Agricultura Familiar Campesina que es de subsistencia y el consumo humano de los APR, estos puntos están primero sobre cualquier otro tipo de extracción en una zona de escasez”.
