La desafiante operación realizada por el equipo de especialistas del Servicio de Especialidades Odontológicas del Hospital de La Serena busca mejorar la calidad de vida del paciente, con grandes beneficios funcionales, preventivos, estéticos y emocionales.
Para Christian, la esperada intervención quirúrgica a la que se sometió hace algunos días cambió su vida para siempre y no sólo en las modificaciones físicas que ha experimentado su rostro, sino aún más en su interior. A dos semanas de la cirugía, este joven oriundo de Las Compañías califica la experiencia como “un antes y un después” en sus 36 años de edad. Así, la ansiedad día a día se ha transformado en felicidad y esperanza. Hoy puede realizar acciones tan cotidianas como comer y respirar mejor e incluso, puede disfrutar de pequeños placeres de la vida como reírse o disfrutar de un delicioso y tentador trozo de torta.
Aún con algunas huellas en su rostro de la gran intervención a la que debió someterse, relata que se ha recuperado muy rápidamente y que se prepara para regresar al trabajo para comenzar una nueva etapa. Si bien reserva su identidad, desea que otros conozcan su historia para que “más personas que tengan un problema parecido puedan operarse aquí en el Hospital de La Serena”.
Además, comenta que gracias a la cirugía hoy en día tiene la posibilidad de “cerrar mejor la boca, porque antes tenía que esforzarme para juntar los labios. Antes para mascar tenía que empujar la mandíbula de abajo hacia delante para poder morder y ahora me es más fácil. Mi mordida antes no calzaba bien y por eso me tuvieron que hacer la operación”. Y es que Christian presentaba un desarrollo menor del tercio inferior de su cara, donde se ubica la mandíbula, lo que dificultaba su vida cotidiana, por ejemplo, al momento de mantener los alimentos dentro su boca mientras comía.
Luego de haber estado hospitalizado durante tres días, hoy expresa con gran satisfacción, que “creía que el proceso iba a ser más doloroso, pero me dieron remedios y me cuidaron harto en el hospital. Ya estoy en mi tercer control después de la operación, quizás estéticamente no es tan notorio aún, pero por dentro se nota más, yo siento el cambio y estoy muy contento. Este es un cambio de vida, tengo que acostumbrarme a mi nuevo rostro. Mi familia está muy contenta con la operación porque la esperamos por mucho tiempo, estamos muy conformes con los resultados”.
Una luz de esperanza tras años de espera:
Quienes tuvieron la gran responsabilidad de sacar adelante esta desafiante intervención quirúrgica, conocida como “ortognática”, fueron los médicos del Servicio de Especialidades Odontológicas del Hospital de La Serena. Hoy, gracias a la exitosa operación de Christian, el establecimiento ofrecerá una respuesta a pacientes beneficiarios del sistema público que se atiendan en el Hospital de La Serena y presenten este tipo de problemas de salud.
“Le dimos una solución a un paciente que llevaba bastante tiempo esperando por la fase quirúrgica de su tratamiento de ortodoncia. Esta intervención le permite mejorar la funcionalidad de la mandíbula para que él pueda tener una mordida adecuada, lo que a su vez, mejorará su respiración, con un impacto positivo en la vía aérea. Aquí hubo un gran esfuerzo de toda nuestra institución y también contamos con el apoyo del doctor Mauricio Carvajal, cirujano experto maxilofacial del Hospital de Coquimbo”, sostuvo el doctor Cristian Blamey, cirujano maxilofacial.
Al respecto, el doctor Felipe Tapia, cirujano maxilofacial del Hospital San Juan de Dios, agregó que “esta es una cirugía que tiene un impacto funcional, respiratorio y también estético para el paciente y sin duda ello lo ayudará mucho también a que se desarrolle en su ámbito social”. Además, el doctor Tapia manifestó que “este es un tema que nos apasiona bastante como cirujanos. Es una cirugía poco habitual, pero nuestra preocupación es resolver un problema de salud que es más común de lo que se cree. Hay gente que por temas económicos no puede pagar por ello, entonces poder abrir este camino les da una nueva oportunidad y también a nosotros para desarrollarnos como profesionales”.
El gran resultado del trabajo en equipo:
Resulta importante destacar que esta cirugía se llevó a cabo gracias a un importante trabajo interdisciplinario y en red y los resultados llenaron de gratificaciones al equipo del Servicio de Especialidad Médicas Odontológicas del Hospital de La Serena.
Pablo Valenzuela, ortodoncista jefe del servicio, se mostró muy satisfecho al término de la intervención, sosteniendo estar muy “contento por este gran logro que se concreta y por lo que significa para el paciente. Esto nos potencia como servicio y nos proyecta en la institución como un equipo que resuelve pacientes beneficiarios del sistema público”.
Además, el odontólogo explicó que el cambio que experimentan estos pacientes es “tan significativo que cambiará también su musculatura, por lo tanto, hay que realizar una re-educación de toda esa área. Nuestro servicio cuenta con un kinesiólogo experto en cabeza y cuello, quien realiza un trabajo vital con el paciente. Se le practicó una terapia pre quirúrgica para favorecer su recuperación y así permitirle que se habitúe en la articulación, fonación y función oclusal (mordida)”, explicó el doctor Valenzuela.