Procedimiento se desarrolló en la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Norte. Carabineros realiza un llamado a la comunidad para que entienda que una broma al 133 le quita la posibilidad de ser atendida a una persona que realmente tiene una emergencia.
Casi justo al mediodía se recibió un llamado a nivel de emergencias 133 en donde un hombre, que se identificó como un docente de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Norte, indicó que había escuchado a algunos alumnos conversando en actitudes sospechosas, los cuales supuestamente habrían estado hablando sobre una bomba y estaba preocupado por la situación.
El personal que atendió la llamada le consultó por más antecedentes, momento en que el individuo corta la llamada. De inmediato se activan los protocolos establecidos para estos casos dando aviso inmediato al Grupo de Operaciones Especiales para que fuera al lugar en calle Larrondo de Coquimbo y también personal del cuadrante uno concurrió a entrevistarse con el Decano.
A este último se le entregó el supuesto nombre del profesor que realizó la llamada y el número de teléfono celular desde la cual ingresó el llamado a la central de comunicaciones, verificando el Decano que no correspondía con ninguno de los profesores. Solicitando de igual forma realizar la revisión preventiva por parte del personal especializado.
El Gope revisó las dependencias, no se encontró ningún artefacto sospechoso ni explosivo en el lugar, por lo que se dio cuenta a la Fiscalía del hecho, entregando todos los antecedentes del falso aviso de bomba