Luego de conocer la experiencia de una planta de tratamiento en base a tecnología japonesa, el Gobierno indicó que iniciará un trabajo para ir replicando esta experiencia en ciertos sectores alejados de la región y que requieren ir aprovechando sus aguas residuales.
Simple, económica y, especialmente, amigable con el medio ambiente. Así es la evaluación que hizo del Gobierno de la Planta de Tratamiento de tecnología Intelligent Pass (IP) que opera en una de las dependencias de la empresa sanitaria Aguas del Valle en la ciudad de La Serena.
El Subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry y la Intendenta Lucía Pinto conocieron esta experiencia que es llevada adelante en conjunto con la empresa privada y la Universidad Católica del Norte, y se proyecta como una solución para ir reutilizando las aguas residuales, especialmente en las localidades rurales.
En este sentido, el Subsecretario Salaberry destacó que “la calidad de vida de las personas está directamente relacionada con el cuidado del medio ambiente, y esta iniciativa responde a ese criterio que impulsa fuertemente el Presidente Sebastián Piñera. Creemos que ésta es una idea extraordinaria que es muy interesante de replicar y por eso vamos a iniciar un proceso para poder implementarla en localidades pobladas, como Río Hurtado, que se han visto afectadas por la escasez de agua”.
Se trata de una iniciativa que utiliza tecnología elaborada en Japón y que se pudo ejecutar en la zona, gracias al financiamiento del Gobierno Regional, como parte de uno de los proyectos financiados con los Fondos de Innovación y Competitividad FIC.
“Esto nació para darle una solución a las zonas rurales que aún no cuentan con un sistema eficiente. Queremos ir desarrollando esta tecnología porque son soluciones viables, de bajo costo y que están pensadas para la calidad de vida de nuestros vecinos que pueden volver a ocupar estas aguas para otros fines”, remarcó la Intendenta Lucía Pinto.
Además de su simpleza, este sistema no emite olores, no requiere de una compleja capacitación y tampoco requiere de grandes instrumentos técnicos. El profesor Joel Barraza, Académico de la facultad de Acuicultura de la UCN, explicó que en el proceso, la materia, en vez de transformarse, se degrada, lo que es mucho más eficiente.
“Esta es una tecnología que funciona en base a bacterias que consumen y eliminan la materia orgánica presente en el agua. Es un sistema que degrada el agua, a través del ciclo del nitrógeno para tener un producto más limpio”, agregó el profesor Barraza.
En términos simples, remarcó el académico, un sistema de filtros es el encargado de convertir el agua, la que al final de su etapa es destinada para riego.
El Gerente de Aguas del Valle, Andrés Nazer, subrayó que “este sistema se probó en un ambiente real. Pues estamos recibiendo las aguas que provienen desde diversos sectores de La Serena y sus resultados son perfectamente aplicables a sistemas de agua potable rural, e incluso en sectores donde puede haber residuos industriales”.
La tecnología Intelligent Pass (IP) se proyecta como una alternativa para reemplazar o complementar las plantas tradicionales de tratamiento o los Sistemas de Agua Potable Rural (APR), pues de acuerdo los expertos, en Japón es una opción que se comenzó a trabajar con éxito hace al menos 10 años, con resultados muy satisfactorios.