En la comunidad Agrícola Cerro Blanco, se realizó la ceremonia de entrega de avances del Proyecto Desarrollo de un Modelo de Inversión Socio-ambiental para tierras semiáridas en Chile, que desarrolla Conaf a través de su Programa de Emergencia de Empleo (PEE), realizadas con las Comunidades Agrícolas de Cerro Blanco y Peñablanca.
El proyecto está enmarcado dentro de las acciones de pilotaje de la Estrategia Nacional de Cambio Climático y Recursos Vegetacionales de la Corporación nacional Forestal en la Región de Coquimbo.
Juan Cerda, Director Regional (S), entregó el saludo en nombre de la corporación a los comuneros asistentes a la ceremonia, enfatizando el trabajo en conjunto con las comunidades. Señaló que “es importante ver el desarrollo de las comunidades agrícolas en torno al trabajo en conjunto que por años hemos desarrollado con la Corporación”.
Domingo Cortés, presidente de la Comunidad Agrícola Cerro Blanco, comentó que el trabajo en con junto con la Conaf “ha significado mucho porque nos apoyan en todo lo que tiene que ver con el cambio climático, el avance del desierto, la deforestación y nosotros seguimos la misma línea de Cionaf, es decir, en la comunidad estamos muy motivados y esperamos que nos sigan apoyando porque nunca es suficiente y acá requerimos de más apoyo”.
Sobre los cambios que han experimentado las comunidades en torno a los trabajos, Daniel Rojas, presidente de la Comunidad Agrícola Peñablanza, sostuvo que “Ha sido tremendamente importante, debido a que nosotros hemos venido trabajando hace varios años y esto nos da un impulso para seguir con nuestro trabajo”. El representante de los comuneros señaló que “en la Comunidad de Peñablanza, las labores se iniciaron el 2005; hay un trabajo de mucho esfuerzo para poderlo mantener en el tiempo, ya que esa es la mayor dificultad que tenemos, sin embargo, todo esto ha ayudado a que las personas valoren y tomen conciencia de lo importante que es el medioambiente y que nosotros no somos una comunidad aislada en temas medioambientales”.
“La Estrategia Nacional de Cambio Climático y Recursos Vegetacionales lanzada en diciembre de 2016, significa un gran paso en la conservación y mejoramiento de los ecosistemas del país, y en particular, para las zonas áridas y semiáridas, representa una oportunidad para el desarrollo de iniciativas que apoyen las acciones de combate a la Desertificación y Degradación de la tierra y que además promuevan la Restauración Ecológica de estos Ecosistemas, ya que además integra en un solo instrumento de planificación los componentes de las tres Convenciones de la Tierra: Cambio Climático, Lucha Contra la Desertificación y Diversidad Biológica”, señaló Daniel Rojas.
El Proyecto cuenta con un presupuesto total de USD 445.959, de los cuales, USD 200.000 corresponden a financiamiento externo para su ejecución, apalancado a través de la misma ENCCRV con fondos administrados por la Convención de Diversidad Biológica, CBD, a través de la Iniciativa de Restauración de Ecosistemas Forestales (FERI, por su sigla en inglés) y por la iniciativa ONUREDD, administradas por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (ONU Medio Ambiente), en el Marco de la Convención de Naciones Unidas para el Cambio Climático, las fuentes de financiamiento aportan USD 50.000 y USD 150.000 respectivamente. El aporte de CONAF, correspondiente a USD 225.959, corresponde a aportes en horas hombre, oficinas, uso de vehículos y administración.
Conaf y CGE entregan capital de trabajo a comuneros.
En la ceremonia también se hizo entrega de herramientas a las comunidades por parte de la empresa CGE- CONAFE y la Corporación Nacional Forestal, con el objetivo de seguir apoyando a las comunidades agrícolas de la región.
Sobre este aporte, Gerardo Maria, Gerente de Instituciones y Comunidades Zona Norte de CGE, comentó que “en una de las reuniones que sostuvimos con CONAF, conocimos este interesante programa ′Comunidades Preparadas′ y de inmediato surgió la inquietud de cómo podíamos colaborar como empresa. Por esta razón hoy estamos haciendo entrega de nuestro aporte en palas y rastrillos, que creo serán de mucha utilidad, especialmente en la labor preventiva”.
Respecto al desarrollo de esta iniciativa, el ejecutivo señaló que “creo que este programa es muy valorable, pues empodera a la comunidad con conocimiento y habilidad para afrontar emergencias, no tan sólo en la época estival, sino que durante todo el año. En la medida que tengamos una población activa, alerta y preparada, como bien lo dice el nombre de este proyecto, se pueden minimizar las afectaciones y daños a la hora de enfrentar incidentes de consideración como son los incendios forestales”.