Con una masiva marcha por el centro de Coquimbo y un acto cultural en la Plaza de Armas de la ciudad, el Colegio Adventista Maranata, celebró el Día Mundial sin tabaco, una fecha instaurada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que desde el año 1987, busca cada 31 de mayo, concientizar a la comunidad sobre los riesgos en la salud generados por el consumo de tabaco.
“El tabaco rompe corazones. Elije salud, no tabaco”, fue el slogan de la campaña impulsada por la OMS a nivel mundial este año, llamando la atención sobre la relación entre el tabaco y las enfermedades del corazón (cardiopatías).
Según el Ministerio de Salud, el 18% de todas las muertes producidas en nuestro país, pueden ser atribuibles al tabaquismo, siendo responsable además de 20.191 infartos e internaciones por enfermedad cardíaca, de allí la importancia de la invitación que realiza el Colegio Adventista a practicar la abstención del cigarro por 24 horas, como una señal para efectuar un cambio cultural en este tema.
“Hace tiempo que no se hacía esta actividad en la cuarta región, pero en todos los lugares donde hay Colegios Adventistas se organiza la marcha un acto público en el día mundial sin tabaco. Lo que buscamos es generar consciencia en la población y la comunidad para que se abstenga de fumar, ya que son hábitos nocivos para el organismo”, señaló Jorge Stagnaro, Director del Colegio Adventista Maranata.
Como médico, el Alcalde Marcelo Pereira, bien conoce los efectos dañinos que produce el tabaco en las personas, por ello valoró la actividad organizada por el Colegio de Adventista, pues fomenta los estilos de vida saludables, “Para recuperar el daño que produce el cigarrillo en el pulmón tienen que pasar muchos años, si es que antes no viene un cáncer o una ataque al corazón. Lo que nos ha enseñado el Colegio Adventista es muy importante, acá nos ha quedado claro el mensaje; replantearse este hábito, tener una vida más sana y dejar de fumar”, señaló el Edil.
Con gran espontaneidad, alegría e innumerables y coloridas pancartas, los estudiantes, muchos de ellos disfrazados de frutas y verduras, se movilizaron en el corazón de la ciudad, haciendo un llamado a los adultos a dejar el mal hábito de fumar.
