Aunque Chile cuenta con más de 4.000 kilómetros de costa, nuestro consumo de productos del mar llega a solo 13 kilos per cápita, muy por debajo de los 20 que recomienda la FAO.
Entre los factores, se cuentan el precio de pescados tradicionales y a no saber cocinar productos más baratos. Por ello, acá te contamos algunas formas ingeniosas para prepararlos.
Chile es conocido por ser el país más angosto del mundo, pero también cuenta con 4.329 kilómetros de costa que ofrecen una enorme cantidad de productos del mar, una opción deliciosa y saludable de alimentos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que los chilenos consumimos 13 kilos per cápita de productos del mar cuando deberíamos comer al menos 20 kilos. Pero esta es una realidad que se está tratando de cambiar. Una de las iniciativas que apunta a ese cambio es la campaña iniciada por la Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca F.G) “Come pescado y súmate al kilo de salud por año”, que busca educar sobre la ingesta de estos productos a través de recetas de bajo costo, pero muy sabrosas.
La iniciativa fue lanzada en diciembre de 2016 y bajo su alero se han organizado “cocinas en vivo” en plazas públicas y ferias libres en distintas ciudades, de Arica a Punta Arenas. “El desafío es impulsar tanto el consumo de productos tradicionales (como la merluza o la reineta) como fomentar el consumo de productos no tradicionales, como la sardina y la anchoveta, destinados generalmente a reducción. También, queremos promover recursos que se destinan a consumo humano, pero principalmente para exportación, como el jurel y la caballa”, afirmó el presidente del gremio, Osciel Velázquez, respecto a la campaña.
Productos del mar de bajo precio
Los choritos, el jurel y la jibia son ingredientes que aportan una gran cantidad de nutrientes, y que las personas pueden adquirir a un precio conveniente. Por ejemplo, el jurel es un pescado azul, rico en ácidos grasos Omega 3, por lo que es un excelente protector del sistema cardiovascular. Además, lo podemos encontrar en cualquier feria libre por un inmejorable valor.
A pesar nuestra variedad de productos del mar, el estudio “Chile Saludable” de la Fundación Chile concluyó que el bajo nivel de consumo se debe, entre otros factores, a la falta de información, mitos y poco conocimiento de alternativas de preparación. Entre alguno de los mitos que detectó está la percepción de que los productos del mar son caros y no satisfacen, además de tener reticencia al olor y el sabor de estos.
En atención a esto, un grupo de emprendedores ha utilizado todo su ingenio para desarrollar productos atractivos para los consumidores, como chips de alga o salchichas de pescado, que buscan acercar estos alimentos a la población.
Si tú eres una de las personas que aún tiene excusas para no comer pescado, acá te dejamos cuatro formas novedosas y muy ricas para integrarlos a tu dieta.
1. Salchichas de pescado.
¿Alguna vez imaginaste un hot dog italiano con sabor a tu pescado favorito? Ahora es posible disfrutar de vienesas fabricadas 100% con este producto, lo que permite contar con una opción más saludable de este clásico alimento, favorito de muchos. Actualmente, puedes comprarlas en cualquier supermercado y utilizarlas para tus completos o como acompañamiento.
2. Choritos gourmet.
Los vemos en todas las ferias y supermercados, pero desconocemos los miles de usos que tiene este saludable molusco. Apanados, en ceviche, en causeo o al pilpil son algunas de las formas en que podemos incorporarlos a nuestros picoteos y quedar como reyes con nuestros invitados, pero gastando muy poco. En sonapesca puedes encontrar un completo recetario para hacer platillos con choritos.
3. Tienes que probar la jibia.
¿No te puedes resistir a los encantos de los locos? Lamentablemente, esta exquisitez tiene un alto costo, pero nuestro mar nos ofrece una alternativa igual de rica y más barata. Se trata de la jibia, cuyo aspecto y sabor la convierten en una gran sustituta del loco. Puedes consumirla con mayonesa o en empanadas o incursionar utilizándola en una rica lasaña.
4. ¡Sácalo de la lata!
A la parrilla, apanado, frito o en croquetas. El jurel no solo viene en lata, también lo puedes comprar fresco y usarlo en tus recetas de siempre o innovar y prepararlo de una forma distinta. Este pescado es uno de los más abundantes en nuestras costas, así como uno de los más baratos. Tiene múltiples beneficios nutricionales y es rico en Omega 3.