Un intenso trabajo realizan los guardianes del borde costero de la comuna, labor que va de la mano del profesionalismo y vocación que caracteriza a estos verdaderos héroes.
El equipo está compuesto por 56 personas, quienes se despliegan a lo largo de todo el territorio marítimo de la ciudad para entregar seguridad y tranquilidad a los bañistas que en esta época ya comienzan a llenar las playas. Entre los casos que han tenido que sortear, explicaron que la mayoría de ellos se debe a la irresponsabilidad y el descuido de las personas. Por lo mismo, hicieron un llamado tanto a serenenses como turistas a tomar las precauciones necesarias para disfrutar de manera segura y evitar posibles desgracias.
De acuerdo al conteo realizado entre el 17 de noviembre hasta el comienzo de la temporada estival, se han realizado 9 rescates y a partir de este periodo hasta la fecha, se han contabilizado 23 adicionales. “Se debe principalmente a la imprudencia de bañarse en playas no aptas, por no respetar la bandera roja o haber ingerido alimentos sin esperar el tiempo necesario para entrar al mar. Por eso es fundamental que la gente se bañe en sectores habilitados, donde puedan visualizar torres de vigilancia”, explicó Yergo Rivera, coordinador municipal de salvavidas de La Serena, quien además informó que de las 32 personas rescatadas, un 65% corresponde a menores de edad.
Los 56 profesionales que se distribuyen en 10 torres, extienden su horario de trabajo hasta las 19:00 horas aproximadamente, dependiendo de la afluencia de público en el sector costero. Respecto a las precauciones, Rivera apeló al autocuidado y a la responsabilidad con los hijos. “El principal consejo que les puedo dar es verificar si la playa cuenta con medios de emergencia, acercarse a los salvavidas y preguntar cuál es el estado de la playa. Si la gente está yendo a lugares inhóspitos, donde no existe rescate, obviamente el riesgo es mucho mayor. Además, están los consejos que entrega la Armada de Chile, como no ingerir alcohol mientras están en el agua, esperar un periodo prudente (1 hora y media) después de ingerir alimentos y no aprender a nadar en mar”.
Con estas recomendaciones, el equipo profesional espera que no lamentar accidentes graves e informaron que el 31 de enero realizarán el corte que permita comparar el número de rescates entre los periodos estivales de 2017 y 2018.