El académico de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Raúl Elgueta, afirma que la elección actual confirma que una gran cantidad de votantes está de acuerdo con las reformas planteadas por la administración de la Presidenta Bachelet.
En este sentido, afirma que el ex Mandatario debe modificar su discurso y ofrecer cambios, aunque en línea con ideas propias de su sector. “Podría situarse, por ejemplo, en la lucha contra los abusos de poder, porque cree en un sistema capitalista que incentiva la competencia”, sostiene.
La “madre de todas las encuestas”, la encuesta CEP, proyectó que el candidato de Chile Vamos, Sebastián Piñera, alcanzaría un 44% en primera vuelta. Sin embargo, el domingo, el ex Presidente marcó solo un 36,64%, piso con el que encarará el balotaje en diciembre contra la carta de La Fuerza de la Mayoría, Alejandro Guillier.
Para el doctor en ciencia política y académico del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Raúl Elgueta, las preferencias de este fin de semana confirman que gran parte de los electores se encuentran alineados con las reformas planteadas por la actual administración de Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, considerando la votación de los candidatos que representan la centroizquierda.
Por eso, considera inevitable que la carta opositora modifique su discurso, para expandirse hacia el centro y ganar votos. “Tiene que proporcionar un discurso reformador, pero sin un componente ideológico de izquierda”, sostiene. “El centro político es una abstracción asociada a la idea de construir reformas de manera ordenada”, agrega.
“El tono del discurso de Piñera es muy positivo y optimista”, continúa el Dr. Elgueta, “cuestionando el desencanto que se habría canalizado en todas las movilizaciones sociales anteriores. Da a entender que ese desencanto no es tal y que la gente está muy contenta”. Sin embargo, indica que la gran votación de Beatriz Sánchez, del Frente Amplio, da a entender que una gran cantidad de votantes que exigen reformas no lo hacen desde “el derrotismo o el resentimiento”.
Por lo tanto, y pese a que reconoce como inviable que pueda cautivar a votantes de ese conglomerado, señala que debe sintonizar con el ambiente que queda posterior a la elección. “Podría situarse, por ejemplo, en la lucha contra los abusos de poder, porque creen en un sistema capitalista que incentiva la competencia, y los abusos y concentración van en contra del capitalismo. Entonces, dan una señal a favor del cambio y las transformaciones”, grafica.
En síntesis, afirma que además de buscar que más de la mitad del electorado del Frente Amplio se abstenga en la segunda vuelta, debe garantizar que su sector puede hacer cambios mejor que Guillier. “Siempre en las elecciones el polo está en el cambio, y eso no significa el desalojo, sino una mejora en las condiciones de vida, estableciendo reformas”, concluye.