Se trata de una intervención pionera en la Región de Coquimbo que viene a mejorar la calidad de vida de pacientes que presentan graves lesiones y en ocasiones son hasta deformantes. Como un gran avance en materia de salud pública fue calificada la primera anastomosis (unión de dos estructuras) microquirúrgica reconstructiva que se realizó en el Hospital de la Serena.
La técnica utiliza el mismo principio del trasplante de órganos, donde se toma una porción de varios tejidos con sus vasos sanguíneos y se conectan en una zona defectuosa, todo ello utilizando instrumental microscópico cuyas suturas son más delgadas que un cabello humano. El colgajo microquirúrgico lleva varios tejidos, no solo piel, sino que fascia, musculo, hueso, grasa, “lo que quieras y tenga sus vasos sanguíneos”, comenta emocionado el Dr. Luis Jaramillo, quien realizó la cirugía. En forma muy didáctica trata de explicar lo que le llevó dos años de especialización en Europa gracias a una beca que le otorgó el Servicio de Salud Coquimbo.
El experto indica que esta técnica es mucho más estética y funcional que cualquier otra antes utilizada, ya que el paciente no rechaza su propio tejido y reintegra a la persona a su actividad cotidiana más rápido. Además, tiene una amplia gama de aplicaciones, lo que en el futuro permitirá entregar soluciones a pacientes oncológicos, traumatológicos, amputados, entre otros.
“No se debe confundir esto con un injerto porque hay mil años luz de distancia”, señala el cirujano del Hospital de La Serena. “En este rumbo hemos dado un gran salto en términos de reconstrucción, del siglo pasado por fin llegamos al actual y nos pusimos a la par con los mejores Servicios de Cirugía de Chile y el Mundo”, destacó el Dr. Jaramillo.
Una luz y nuevas oportunidades
Se encienden las luces en uno de los pabellones del Hospital de La Serena y dos equipos se preparan para hacer historia. Luego de varias reuniones de planificación, exámenes y conversaciones con el paciente, se da luz verde para realizar una cirugía combinada oncológica, donde, por primera vez en la región, se realizó el tiempo reconstructivo en la misma intervención.
Don Hernán Tapia, de 79 años, ha puesto todas sus esperanzas para que al despertar desaparezca el cáncer basocelular de piel, que le impide tener una vida normal desde hace mucho tiempo, ya que su condición se agravó debiendo someterse a curaciones hasta 4 veces al día y soportar intensos dolores e incomodidades que provienen de la zona auricular derecha.
Para que Don Hernán, el conocido hojalatero de Manquehua de Combarbalá, pueda retomar su vida junto a su esposa, 4 hijos y 8 nietos; el experimentado Equipo de Cabeza y Cuello hará su trabajo como es habitual. El problema es que este tipo de pacientes, quedan con un defecto tremendo en el rostro, sin embargo, este no fue el caso gracias al Equipo de Microcirugía Reconstructiva, que esperaba atento su turno.
A don Hernán se le realizó un colgajo radial microquirúrgico, es decir, tomaron un tejido colgado de una arteria desde el antebrazo y lo conectaron a la arteria facial para cubrir un gran forado que dejó el cáncer extraído, explicó el Dr. Luis Jaramillo, quien aprovechó la oportunidad para destacar el apoyo que brindó el Equipo de Cabeza y Cuello, “trabajamos de una muy buena manera con los Doctores Juan Manuel Scarton y Martín Nicola, actual Jefe del Servicio de Cirugía de la institución. Ambos cirujanos son de primer nivel cuya expertiz también permitió asegurar el éxito de la operación”, puntualizó Jaramillo.
Para el Cirujano del Equipo de Cabeza y Cuello, el Dr. Scarton, esta alianza viene a fortalecer enormemente el trabajo, “ya que algunos pacientes eran tratados del cáncer pero quedaban con afecciones deformantes importantes. Esto es simplemente el inicio, ya que pensamos hacer procedimientos aún más complejos”, indicó el especialista Venezolano que se desempeña en el Hospital de La Serena desde hace dos años.
Estas intervenciones, si bien son complejas, no revisten un mayor riesgo para el paciente y pueden tomar desde una mañana hasta un día completo dependiendo del caso. El especialista en Microcirugía, Dr. Luis Jaramillo aseguró que el equipo clínico del Hospital de La Serena está preparado para asumir estos desafíos, “tenemos personal en el pabellón que conoce el manejo del instrumental microquirúrgico porque muchos se desempeñan en oftalmología y otorrinolaringología, servicios donde también se utilizan técnicas microscópicas”, explicó.
Planificación que rinde frutos
El Servicio de Cirugía del Hospital de La Serena cuenta con varios equipos altamente especializados que año tras año mejoran y aumentan la oferta quirúrgica regional. Sólo en el año 2016, en el hospital se realizaron más de 14.000 intervenciones quirúrgicas y este año las cifran son mayores.
La gran actividad quirúrgica que no es casualidad y la incorporación de la microcirugía, mucho menos una acción aislada y repentina. Por el contrario, desde hace muchos años las diferentes jefaturas del Servicio de Cirugía tomaron la decisión y apostaron por un proceso de formación de equipos altamente especializados.
Así lo confirma el Director del Hospital de La Serena, Edgardo González, “lo que estamos viendo hoy son los frutos de una adecuada planificación, que cuenta con el apoyo del Equipo Directivo del Hospital, y se sustenta en el envío de nuestros cirujanos a formarse en los mejores centros de salud del mundo. Por esta razón hoy damos respuesta a complejas patologías a través de los Equipos de Cabeza y Cuello, Cirugía de Mama, Tórax, Digestiva, Oncológica y Vascular Periférica”, puntualizó el director.
El gran staff de cirujanos del Hospital de La Serena trabaja en forma integrada con otras especialidades para dar una mejor respuesta terapéutica a los pacientes. Esto a la vez, ha sido atractivo para los médicos generales que se están formando y vienen a realizar sus becas de cirugía en el nosocomio local.
El Director del Hospital de La Serena se mostró muy contento con los resultados y agregó que quieren mejorar aún más, por lo que “estamos trabajando arduamente en las brechas detectadas para aumentar los pabellones quirúrgicos y dotación; ya que se tienen altas expectativas de potenciar aún más el área que, por un lado, debe tener en control la oferta de patologías comunes que requieren respuesta quirúrgica y por otro, aumentar la cartera en complejidad”, concluyó Edgardo Gonzáles.