La entrega del informe coincide con la muerte de otro buzo en la región producto de una descompresión y luego de ser trasladado a Valparaíso.
El diputado Miguel Ángel Alvarado se refirió al “Informe de Investigación Especial” que la Contraloría regional realizó al Servicio de Salud Coquimbo y al Hospital San Pablo de Coquimbo, donde se entregan las conclusiones de porqué las dos cámaras hiperbáricas de la región nunca entraron en funcionamiento.
Al respecto señaló que el informe es “lapidario”, dando cuenta de la nula acción para poner en funcionamiento las cámaras “y esto tiene implicancias que se dan cuenta en ello. En el gasto de traslado de los pacientes, sin considerar los factores médicos y los factores humanos, económicamente, solamente ese hecho tan frio, sobrepasa con creces lo que hubiese sido tener una cámara hiperbárica en el hospital de Coquimbo. Incluso sin considerar que hubiera servido para muchas enfermedades”.
Alvarado destacó que presentará el próximo martes en la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados lo sucedido, citando a la Ministra de Salud, Carmen Castillo y a expertos en el tema, donde planteará las conclusiones del informe y la cantidad de tiempo que ha transcurrido desde la entrega de ambas cámaras. Sobre este punto afirmó que “no se ha hecho nada en años, porque no estamos hablando acá de meses, no hablamos de un año, sino que son varios años”, agregando sobre la cámara donada al hospital de Los Vilos y que luego fue devuelta, que la autoridad “nunca tuvo la intención de echarla a andar. Yo creo que esos elementos son bastante categóricos, que la contraloría ha dictaminado y ahora, por cierto, porque son dineros públicos”.
Necesarias en la Región de Coquimbo
El informe detalla que desde el año 2013, cuando se donó la cámara hiperbárica al hospital de Los Vilos, hasta febrero del 2017 ocurrieron un total de 63 accidentes de buzos por Enfermedad Asociada a Descompresión Inadecuada en la región de Coquimbo, superando con creces a otras del país.
“No podemos permanecer impasibles, viendo cómo año a año se incrementan las cifras de fallecidos y otros tantos que tienen lesiones, ahora también consideremos que existe una alta cantidad que no notifican los accidentes. Entonces esta situación es intolerable, del punto de vista médico, del punto de vista humano, del económico, no hay ningún argumento que pueda justificar lo injustificable, que es tener botada una cámara de tan alto costo en un hospital”, sentenció Alvarado.
