Realiza su producto a base de aceitunas picual, una variedad de origen europeo y poseedora de considerables propiedades para el cuidado de enfermedades cardiovasculares.
Con un ligero equipaje, y un pasaje sin retorno, Jan Van Dijk dejó su natal Holanda para establecerse en la localidad de Los Choros -comuna de La Higuera- y deleitar a sus habitantes con la calidad e inocuidad del producto olivícola de su emprendimiento “Finca Las Tencas”.
Ya son 25 años los que Van Dijk lleva viviendo en el país, y a lo largo del tiempo ha recopilado una amplia gama de conocimientos que lo han llevado a realizar un aceite de oliva de altos estándares de calidad, a base de la exclusiva variedad de aceitunas picual.
Es así que en su predio de 3 hectáreas cultiva esta gama del fruto del olivo, el cual es de origen europeo y posee considerables propiedades para el cuidado de enfermedades cardiovasculares. Actualmente, son muy pocos los olivicultores que trabajan con este gourmet ingrediente, transformando el producto de Jan en un verdadero privilegio para el paladar.
Al respecto, el emprendedor y usuario del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) destaca que “la picual hace que el aceite tenga una gran personalidad, se trata de un producto frutado, con notas positivas de amargo y picante. El perfil nutricional de esta aceituna hace de este aceite una de las mejores opciones para el cuidado de la salud del ser humano”.
Del porqué eligió a Chile, y en especial La Higuera, para desarrollar una nueva vida, Van Dijk comenta que “este es un territorio maravilloso, tiene poca contaminación lo que lo hace muy grato para descansar. Por otra parte, yo escogí a Los Choros porque es un pequeño oasis, tiene una magia enorme, además es un pueblo donde puedo aportar a detener un poco la desertificación”.
UN FUTURO CON ALTAS EXPECTATIVAS
“De los años que estoy viviendo en Chile, 15 los he dedicado al tema olivícola, pero debo confesar que llegué de Europa no sabiendo nada del tema, yo lo que he aprendido lo he hecho gracias a INDAP, con ellos he estado desde un principio. Estoy muy agradecido principalmente por las capacitaciones a las que he podido asistir; siempre feliz de continuar aprendiendo”, recuerda el usuario del servicio del Ministerio de Agricultura.
Para potenciar su trabajo, Jan también ha recibido asesoría de profesionales de la Universidad de La Serena, en el marco de un convenio entre dicha casa de estudios y el INDAP. Al respecto, el holandés comenta que “me permitió que expertos me guiaran para seguir perfeccionando mi aceite. Si bien han valorado mis productos diciéndome que es un aceite para concurso, la idea es siempre ir por más”.
Sumado a lo anterior, detalla que “prontamente tendré la oportunidad de someter mi aceite a un análisis avanzado que corroborará lo puro y limpio de mi trabajo”.
En relación a los canales de comercialización de sus productos, Van Dijk indica que “actualmente vendo a la gente del sector, a quienes saben de la calidad de mi trabajo. A veces me piden de Santiago también. Recientemente a través de la Olivicoop, la Cooperativa de Olivicultores de Los Choros a la cual pertenezco, nos dijeron que había una ventana para comercializar a Brasil. Si bien no es nada concreto, yo soy feliz con esa posibilidad”.
Quienes deseen conocer el trabajo o cautivarse con el privilegiado sabor del aceite de oliva que produce Jan Van Dijk pueden contactarlo al celular +56958572433.