Menores ventas inmobiliarias provocaron que la zona liderara estancamiento de la industria a nivel país.
Si bien se sabía que el año 2017 no sería fácil para los sectores productivos del país, debido a la incertidumbre empresarial, falta de inversiones y restricciones de créditos, el primer mes del actual ejercicio no podía haber empezado peor para la industria de la construcción. Esto, porque de acuerdo al Índice de la Actividad de la Construcción (INACOR), que elabora la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), durante el mes de enero hubo una caída de 10%.
Este número no sólo implica ser la región con peor desempeño en los últimos doce meses, sino que también sienta un manto de dudas acerca de cómo vendrán los próximos meses. “Estamos muy preocupados, ya que hemos sentido cómo ciertos subsectores -como el inmobiliario y la infraestructura- se han contraído, lo que explicaría estos resultados”, aseveró el presidente de CChC La Serena, Martín Bruna.
Si se desean buscar razones, la actividad inmobiliaria ha arrastrado al sector con desempeños muy mesurados. De acuerdo al informe del gremio, la actividad inmobiliaria mostró cierto grado de deterioro con ventas mucho menores a lo proyectado. Es así como se tiene la percepción, entre las empresas entrevistadas para confeccionar este informe, que existe un mayor stock disponible y una reducción de la demanda, principalmente por el empeoramiento de las condiciones financieras de los clientes.
Esto se reflejó en la Vitrina Inmobiliaria acontecida en febrero pasado, pues -si bien no fue considerada por fecha en el INACOR- demuestra la situación actual. “Tuvimos una disminución importante en cuanto a ventas en la feria del verano, ya que realizamos transacciones comerciales por $800 millones, mientras que en 2016 fue de $2.000 millones”, explicó Mauricio Araya, presidente del Comité de Vivienda de CChC La Serena.
En todo caso, desde el gremio establecen que esa cifra responde a los coletazos del auge de ventas que se produjo en 2015 y el verano de 2016 ante la entrada en vigencia del IVA en la vivienda.
MENOR FINANCIAMIENTO
Uno de los aspectos que recurrentemente son citados en el Índice de Actividad de la Construcción Regional son las trabas crediticias estipuladas por los bancos tanto para personas naturales como jurídicas. Es así como las condiciones de financiamiento más restrictivas se han sumado a una elevada incertidumbre laboral, provocando que no se puedan cerrar tratos inmobiliarios.
La base de esa explicación se desprende de la Encuesta de Créditos Bancarios y del Informe de Percepción de Negocios elaborados por el Banco Central, donde las condiciones de acceso al crédito continúan restringidas, tanto para empresas como personas. Además, se observa una menor demanda por crédito en todos los segmentos, lo que evidencia una postura cautelosa por parte de los bancos, empresas y hogares. “No es de extrañar que la actividad sectorial continúe transitando por un régimen de escaso crecimiento tendencial”, pronosticaba a fines del año pasado el gerente de Estudios de CChC, Javier Hurtado.
PANORAMA NACIONAL
A nivel país, los resultados tampoco fueron muy alentadores, ya que el Índice Mensual de Actividad de la Construcción (IMACON), también elaborado por la CChC, exhibió una caída anual de 5,9% en enero.
El gerente de Estudios del gremio, Javier Hurtado, destacó que “por primera vez desde la Crisis Subprime todos los componentes del IMACON tuvieron variación negativa y una cifra tan baja como la registrada el primer mes de este año no se observaba desde octubre de 2009, también en plena Crisis Subprime”.
En tanto, Sergio Torretti, presidente de la CChC, explicó que “el fuerte retroceso que experimentó la actividad sectorial es coherente con el bajo crecimiento económico que experimenta el país, sumado a la baja inversión privada, que se traduce en un permanente pesimismo de parte de los empresarios y una elevada incertidumbre sobre la economía chilena”.
