La empresa internacional Resolve Salvage and Fire, durante su primera jornada, retiró cerca de 5 mil litros de este material contenido en la embarcación. Trabajos que fueron financiados por el Gobierno Regional.
Bajo estrictas medidas de seguridad comenzó el retiro de los restos oleosos desde el buque don Humberto en la bahía de Coquimbo. Una labor minuciosa alrededor de un navío que lleva abandonada 24 años, y que fue supervisada por el Intendente Claudio Ibáñez.
Luego de visitar el proceso de extracción, el jefe regional dijo que “hace algunos días recibimos los primeros equipos técnicos y hoy ya hemos iniciado estos trabajos. El desafío es complejo y de alto estándar de seguridad. Durante la primera jornada se espera obtener entre 5 mil a 7 mil litros desde uno de sus compartimientos”.
Trabajos que fueron financiados por el Gobierno Regional de Coquimbo por 350 millones de pesos y que permitieron adjudicar las faenas a la empresa internacional Resolve Salvage and Fire. “Aquí estamos sellando un trabajo largamente anhelado por la comunidad para proteger la bahía de Coquimbo, porque como Gobierno estamos preocupado por los eventuales impactos en la fauna marina y también de las actividades productivas. Esto es un hito luego de una gestión conjunta donde participamos junto a los vecinos, los Consejeros Regionales, el municipio y los parlamentarios”, enfatizó el Intendente Ibáñez.
Dichas trabajos comenzaron en los estanques de almacenamiento de la proa de la embarcación. Desde Resolve, explicaron que se irá descendiendo hasta los demás estanques vía taladro y ajuste de válvulas, a través de un sistema de perforado y succión, con equipos denominados “mosquitos”.
Francis Leckey, Director de Operaciones Marinas de la empresa, comentó que “los primeros restos oleosos provienen de la bodega número 1. Nuestros buzos explorarán toda el área del resto náufrago. Hoy partimos con 5 mil litros y después empezaremos las inspecciones con el mosquito, con este dispositivo queda sellado el estanque y prepara la bomba para la extracción”.
Para este proceso se está utilizando un equipo profesional compuesto por 15 operadores chilenos, 5 expertos de Estados Unidos y 2 de Noruega, tarea que ha sido seguida por la autoridad marítima y destacada por el municipio.
“Estamos monitoreando los trámites de contingencia ante eventuales derrames y los planes de seguridad a bordo de la embarcación. El barco fue preparado la semana pasada en el área de la cubierta para que la zona fuera segura para los operadores”, señaló el Gobernador Marítimo de Coquimbo, Capitán Nelson Saavedra.
En tanto, el Alcalde de Coquimbo, Cristian Galleguillos, manifestó que “por fin llegamos a este punto, un anhelo de nuestra gente de Coquimbo. Eso nos deja más tranquilos, porque todo este trabajo está pensado en la bahía, el turismo, el comercio y nuestros pescadores”.
Según la empresa, una vez perforado los estanques de almacenamiento y drenaje, se podrá calcular la cantidad exacta de los restos oleosos contenidos en el buque abandonado. Un proceso de extracción que podría demorar unos 21 días, aproximadamente.