La iniciativa es impulsada por el Gobierno para ayudar a las familias que se han visto afectadas en sus trabajos, producto de la escasez hídrica.
Desde octubre del año 2014 que se ejecuta en la Región de Coquimbo el programa Pro Empleo, iniciativa que apunta a contener la reducción de fuentes laborales a causa de la escasez hídrica.
Hasta la fecha, y gracias al aumento de cupos que dio el Gobierno para mitigar la afectación en la economía familiar, este programa está beneficiando a unas 2 mil personas, entre ellos a Doris López de la comuna de Ovalle.
“Esto es un gran apoyo. Porque yo soy madre soltera y tengo que mantener a mis dos hijas. El trabajo estaba escaso, así que debía encontrar algo y con esto puedo dar un sustento para la casa”, indicó.
Como ella, sólo en esta comuna se registran 240 familias beneficiadas con el Pro Empleo, el que entrega oportunidades laborales tanto en media jornada como jornada completa.
Por su parte, Carlos Cortés, comentó que “estos trabajos son muy necesarios. Considero que ha sido una gran ayuda, que ha permitido empezar bien los primeros meses del año”.
Y es que la capital de la Provincia de Limarí es una de las más afectadas en sus fuentes laborales por la sequía.
En este sentido, el Intendente Claudio Ibáñez, quien encabezó una jornada de pago de remuneraciones en Ovalle, manifestó que “el problema de la sequía afecta en muchos ámbitos, y uno de ellos es la fuente laboral. Por ello, la Presidenta Bachelet ha impulsado este programa con una de las coberturas más grandes del país. No queremos que aumente el desempleo, vamos a seguir apoyando a las familias afectadas y para eso estamos muy comprometidos para que las personas tengan un empleo, con calidad y dignidad”.
“Desde que participo, estoy recibiendo platita que antes no tenía. Espero que se mantenga el programa, porque todo lo que sea apoyo para el trabajo, bienvenido sea”, acotó Doris López.
En términos de cobertura del Pro Empleo, la Región de Coquimbo sólo es superada por el Bío Bío. Un programa que en el zona beneficia en un 80% a mujeres jefas de hogar y que se ha consolidado tras la coordinación entre el Gobierno, a través de la Subsecretaria del Trabajo y los municipios, éstos últimos, encargados de concretarlo de acuerdo a las necesidades de sus vecinos.
