Hasta el año pasado existían 131 proyectos residenciales en ambas comunas que significaban un universo de más de 13.700 hogares.
En 2011 la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) La Serena, a través de su Comité de Vivienda, impulsó una inédita idea para la zona con la intención que surtiera de datos cuantitativos y verificables del crecimiento residencial que experimentaba la conurbación La Serena – Coquimbo: Al proyecto se le denominó Catastro Inmobiliario y hasta la fecha es el instrumento clave para analizar el comportamiento de este subsector productivo.
Lo cierto es que La Serena y Coquimbo se convertirán en la primera área metropolitana del norte de Chile en la próxima década, lo que sugiere una serie de desafíos viales, de servicios, educacionales, sanitarios, comerciales y, por cierto, habitacionales. Por ello es que muchas industrias vieron con buenos ojos hace algunos años reforzar las prestaciones básicas para la ciudadanía, como fue el caso de Endesa, Enersis y GasValpo, quienes inauguraron de la primera planta de distribución de gas natural licuado (GNL) en el Barrio Industrial la semana pasada y que proporcionará energía a más de 3 mil clientes entre hogares e industrias.
Claro fue el mensaje del gerente general de GasValpo, Luis Kipreos, quien resaltó los US$7 millones de inversión que harían en la zona y que representa más de la mitad del desembolso nacional para este ejercicio. “Estamos haciendo una inversión de US$1.000 dólares por cada hogar, pues sabemos que acá el crecimiento inmobiliario ha sido fuerte y fundamental para que tomemos la decisión de operar en La Serena y Coquimbo. Esto explica la ampliación de la inversión en 30% para este año”, sostuvo el ejecutivo.
Y los números hablan por sí solos, pues en 2011 -año cuando se comenzó a medir el auge inmobiliario- existían 84 proyectos que representaban 7.700 viviendas., mientras que en 2015 esa cifra aumentó a 131 iniciativas que explicaban la construcción de 13.700 domicilios, estipulando un crecimiento de 55% en proyectos y de 78% en unidades. “Son 10 mil las personas que año a año llegan a la conurbación, por lo que se necesita una cobertura residencial”, aseveró el presidente de CChC La Serena, Martín Bruna, quien avizora una conservación de la tendencia de construcción de viviendas.
En cuanto a la nueva alternativa energética, Bruna resaltó los beneficios de este fuente y del interés de los inmobiliarios de incorporarlo como servicio. “Es una energía limpia que representa una opción a los combustibles fósiles y es un 30% más barata que su competencia, lo que se traduce en un incentivo para el cliente final. Claramente es un servicio que debemos analizar para hacerlo parte de las iniciativas inmobiliarias”, manifestó el directivo.
La Serena y Coquimbo se convirtieron en la cuarta zona donde existen plantas de GNL, sumándose a Talca, Los Andes y Temuco que totalizan 130 kilómetros de redes de abastecimiento.