Para esta emprendedora de la IV región, lo antiguo es sinónimo de calidad e innovación comercial.
Carmen Gloria Riveros es una mujer de 60 años que apuesta por lo novedoso y distinto. Su mundo como emprendedora gira en torno a objetos que muchas veces tenemos en el último rincón de nuestras casas, pero que, sin duda, tienen un gran valor simbólico e histórico.
La venta de antigüedades fue un rubro que llegó por casualidad a la vida de Carmen Gloria, de hecho, surgió como una iniciativa de su anterior trabajo en el cual le encomendaron la misión de realizar una exposición de antigüedades en una bodega. Con el paso de los días, y aun llevando a cabo la muestra, la emprendedora se percató de que a los asistentes les llamaba la atención el mundo de las reliquias familiares, e incluso, muchos preguntaban si los objetos estaban a la venta. Fue de esta forma que en el año 2010 la comerciante, proveniente de Ovalle, decidió empezar su nuevo negocio.
“Comencé de a poco armando mi local en la feria y hace dos años atrás, asesoras de Fondo Esperanza (FE) vinieron a hablarnos de la metodología de la institución y nos gustó. Formamos el Banco Comunal (BC) ‘Los insuperables’ y debo decir que estoy orgullosa de mi grupo porque tenemos una muy buena relación, somos trabajadores, empeñosos y comprometidos”, explicó la emprendedora.
Respecto a su novedoso negocio, Carmen Gloria explicó que le llamó la atención porque era algo distinto y que, a la vez, era bastante rentable. “Siempre me gustó la historia y me llamó la atención que cada objeto que poseemos tenga su propia leyenda, eso sirve harto porque es algo que le interesa a la gente. Sobre la compra de objetos, es súper interesante lo que sucede porque son los propios dueños los que vienen a venderme sus pertenencias a la feria. Me cuentan la historia del objeto, les pregunto el año, observo el estado en el que se encuentra y lo tazo en una cantidad. Mientras más antiguo más valor”.
Uno de los acontecimientos más anecdóticos que recuerda la ovallina es que hace algunos años le llegaron a vender una mano humana petrificada. “Fue una experiencia entretenida. No sabía si era real o no, tampoco quise averiguarlo. La tengo de exposición, definitivamente no pude venderla, porque es muy novedosa”, indica.
Sobre su trayectoria en Fondo Esperanza, Carmen Gloria comenta que ha sido una oportunidad maravillosa de crecimiento. “He tenido una grata historia junto a la institución, porque se aprecia mucho el compromiso y la coavalidad que desarrollamos como Banco Comunal. Todo es súper honesto y responsable. Es increíble como Fondo Esperanza ayuda, enseña y hace crecer con compañerismo”, finalizó.
Conoce a esta destacada emprendedora y sus productos en la “Feria Modelo” de Ovalle, que se ubica subiendo por Benavente hacia la Cordillera. Es el corazón comercial del Limarí.
