Presidente de CChC La Serena considera que este año se avecina complejo, pero cree en la alianza público – privada para salir adelante.
Todas las estimaciones para la economía nacional son poco auspiciosas para el año 2016. Y, por cierto, más bajas que las proyectadas hace doce meses y mucho menores a aquellas cuando asumió esta nueva administración de Gobierno en marzo de 2014. La expansión del PIB de Chile, entre un 1,8 y un 2 por ciento, está por debajo de las expectativas de los sectores productivos, lo que ha llevado a encender las luces de alerta y a tomar cartas en el asunto.
Uno de los que ha manifestado la atención sobre el tema es la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) La Serena, que ya anunció un crecimiento mínimo de la industria para este ejercicio provocado por la falta de inversión. “Vemos con preocupación la incertidumbre que existe para los inversionistas, lo que no permite visualizar una recuperación rápida de nuestra economía, ya que sin inversión no hay crecimiento y sin crecimiento no hay empleo”, dijo su presidente Martín Bruna.
En todo caso, Bruna se mostró dispuesto a cooperar con las entidades del Estado, para cambiar este crítico escenario. “Desde ya les decimos a las autoridades que estamos llanos a colaborar para direccionar los esfuerzos hacia el crecimiento de la región”. Para ello, y tras la conclusión de un año difícil, el timonel del gremio pone los acentos en tres áreas: Infraestructura, empleo y seguridad laboral.
“Son tres ámbitos que explican el trabajo diario de las empresas socias de la CChC y que ha permitido no sólo aumentar la productividad, sino que también establecer mejores estándares de operación y contribuir con el desarrollo del territorio”, manifestó Bruna.
MÁS OBRAS
La región ha tenido un despegue innegable en los últimos 20 años, lo que se ha traducido en un alza de la población y, por ende, de sus demandas. Prueba de ello es que en la próxima década la conurbación La Serena – Coquimbo se transformará en la primera zona metropolitana del norte de Chile con más de 514 mil habitantes. Esto supone la llegada de más de 10 mil nuevos vecinos cada año. Para ello, el gremio ha sido claro: Hay que agilizar la infraestructura que garantice la calidad de vida y operatividad del territorio. “Somos uno de los países de la OCDE que menos invierte en infraestructura de acuerdo a su PIB. Es un desafío el reducir la brecha que se está generando, de allí que nuestro trabajo con los ministerios de Obras Públicas y Vivienda y Urbanismo resulta clave”, dijo Bruna.
Entre las obras más relevantes se cuentan las viales y hospitalarias, por lo que la CChC La Serena esgrime un camino. “El modelo de concesiones no sólo ha permitido aumentar la calidad de los servicios para los usuarios, sino que también agilizar los tiempos de ejecución. Hoy el Estado tiene una alta carga fiscal, lo que puede generar retrasos en la asignación de recursos para ciertas obras, de allí que el rol de los privados sea subsanar ese déficit”, indicó el dirigente.
El año pasado, la Coordinación de Concesiones del MOP estimó que La Serena y Coquimbo presentaban una carencia de infraestructura de US$133 millones.
TRABAJO
Si bien la región vio bajar la tasa de desempleo en el trimestre septiembre – noviembre en un 0,5% para situarse en un 6,6%, las cifras siguen siendo altas, lo que mantiene preocupados a los representantes del gremio. Esto, más aún cuando durante cuatro trimestres hubo números negativos para el sector, sólo recuperándose en el actual periodo con un exiguo 2,1%.
Martín Bruna, más allá de hacer un análisis cuantitativo -donde entre mayo y agosto hubo retrocesos de 2,7%, 4%, 5,1% y 5,2%- establece la responsabilidad del gremio con los más de 37 mil trabajadores que posee el sector en la zona. “Son 37 mil familias que nos importan y donde deseamos que sus jefes de hogar cuenten con un empleo seguro, bien remunerado y de calidad”, expresó.
Para ello, este año se seguirá impulsando el plan de capacitación y adquisición de competencias laborales para optimizar la formación técnica, lo que promueve un alza en los salarios, movilidad laboral y reducción de pérdida de empleo.
SEGURIDAD LABORAL
El capital humano se ha convertido en un bastión fundamental para el liderazgo que ha obtenido la Cámara Chilena de la Construcción en sus 65 años, por ello es que muchas empresas socias han incorporado la seguridad laboral dentro de sus operaciones. “Nuestro compromiso es que año a año hemos incrementado los niveles de exigencia, pues si en 2012 la meta de accidentabilidad era de 4,59%, el año pasado fue de 3,16%, lo que sugirió un compromiso total de las empresas, partiendo desde la alta gerencia hasta los jornales”, puntualizó Bruna.
“Este 2016 queremos consolidar este trabajo -bajo el alero de la Comisión de Prevención de Riesgos- a través de la implementación de una cultura de seguridad solventada con el Programa 7 Reglas de Oro”, finalizó.
