El evento no se pudo realizar en septiembre debido a las consecuencias del terremoto.
Sin dudas que ya es un evento tradicional de la localidad de El Tambo. La Mateada Mistraliana, que se realiza desde el año 2003, convoca año a año a vecinos de la localidad y visitantes de diversos puntos de la región, los que se reúnen en la plaza para disfrutar de mates, churrascas, quesos de cabra, cuecas, trovadores y música en vivo.
La actividad, que fue instaurada por incentivo del ex párroco de Vicuña, Fidel Carmona, para reunir fondos y llevar a cabo la reconstrucción de la iglesia que se había incendiado en abril del 2003, tiene en la actualidad un decreto municipal que tiene como fecha de realización el 26 de septiembre de cada año.
Esta vez la situación fue distinta, debido a las consecuencias del terremoto del mes pasado, sin embargo se realizó este fin de semana, convocando una gran cantidad de asistentes, lo cual fue destacado por la presidenta de la junta de vecinos, Adriana Cuevas. “Estamos muy contentos porque pese al cambio de fecha la gente llegó igual, especialmente los afdultos mayores, vemos a la familia reunida y eso es muy bonito”, sostuvo.
Es así como con esta actividad se recuerda la visita de Mistral a El Tambo la que es disfrutada por toda la comunidad elquina y turistas que visitan la zona, rememorando ese 26 de septiembre de 1954. “Yo soy de Villaseca y tuve la suerte de conocerla, era muy niña y ella nos regaló zapatos cuando vivíamos en la Quebrada de Pinto, yo me crie en esa escuelita, son recuerdos que tenemos de esos años, por lo mismo disfrutamos de venir a esta actividad, ya es toda una tradición”, relató una de las asistentes a esta mateada, Nelva Aqueda
El evento es organizado por la junta de vecinos, la municipalidad de Vicuña y el apoyo de diversas organizaciones comunitarias de la localidad. El Alcalde de Vicuña, Rafael Vera, quien también disfrutó de esta jornada, felicitó a cada uno de los participantes y también a la organización. “El Tambo es un pueblo lleno de cultura e historia. Ella estuvo aquí en una casa disfrutando de un mate, que más solidario y participativo que compartir un mate. Hemos querido rescatar estas tradicionales, es algo que lo hizo el padre Fidel hace una década atrás, pero que seguiremos apoyando desde la municipalidad”, sostuvo el jefe edilicio.
Carlos Alfonso Flores es tambino de toda la vida, pero desde hace 50 años que vive en Calama. Viene todos los años a esta actividad, ya que la siente muy suya, pues estuvo presente en aquel 26 de septiembre de 1954 cuando Mistral visitó por última vez el Valle del Elqui y pasó por El Tambo. “Esto es muy bonito, que se reúna toda la familia, yo estuve cuando Gabriela Mistral pasó por aquí y tomó mate, éramos unos niños y vinimos a ver, pues llegó de repente. Esta actividad que debe seguir creciendo, ojala que con los años podamos contar con escenario y así disfrutar cada año de esta mateada”, indicó.
Las nuevas generaciones también se han hecho parte de esta tradición de la localidad de El Tambo. Un ejemplo de aquello es la familia de Mónica Ramos Tapia, quienes desde la primera mateada (2003) disfrutan de este patrimonio. “Antes veníamos con mi abuela, mi tía, ahora estamos con hijos y sobrinos, seguimos la tradición, familiares de afuera también nos visitan año a año, ya está muy famosa esta mateada”, explicó.