Con Acuerdo de Producción Limpia se busca elevar estándares de seguridad y gestión productiva de la actividad económica de mayor relevancia en la región.
Para impulsar el desarrollo sustentable de los asentamientos y plantas de la pequeña minería de Coquimbo, el Consejo Nacional de Producción Limpia y la Corporación para el desarrollo de la Pequeña Minería (CORPEMIN) suscribieron un Acuerdo que beneficiará a pequeños mineros y plantas de las provincias de Elqui, Limarí y Choapa.
En una ceremonia encabezada por el intendente Claudio Ibañez, se puso en marcha el Acuerdo de Producción Limpia (APL) “Minería de extracción y Plantas de procesamiento de la pequeña minería”, que busca generar un conjunto de acciones que permitan incorporar la estrategia de Producción Limpia para elevar la seguridad minera, la habitabilidad de los campamentos y la gestión productiva de los asociados mineros.
El APL espera la adhesión de alrededor de 30 empresas 100% mipymes, con 120 trabajadores directos, correspondientes a 10 plantas y 20 mineras de extracción. Participan además los seremis de Minería, Salud y del Medio Ambiente, SERNAGEOMÍN y la Prefectura de Carabineros de La Serena.
El director ejecutivo del Consejo Nacional de Producción Limpia, Juan Ladrón de Guevara, valoró el Acuerdo como un gran paso para el afianzamiento de un sector productivo relevante para la economía de la región y el país.
“Con este APL esperamos potenciar la integración del concepto mina planta de la pequeña minería para impulsar también, y muy significativamente, el desarrollo de economías locales deprimidas que hoy están fuera del sistema por efectos logísticos. La idea es generar una sinergia de manera de lograr un producto comercializable que llega a destino minimizando y optimizando sus impactos en los trabajadores y el medio ambiente”, aseguró el ejecutivo de Producción Limpia.
En tanto, el intendente Claudio Ibañez valoró el Acuerdo como una instancia para enfrentar los desafíos del sector. “Porque existen brechas importantes y significativas en materia de regularización de las faenas mineras, y por tanto el desafío es mejorar la regularización de las faenas; existen problemas de seguridad y salud en el trabajo, por eso en este Acuerdo se contempla incrementar en los beneficiarios la seguridad para reducir la tasa de accidentalidad”, indicó.
Por su parte, el seremi de Minería, Igor Díaz, expresó que es un reconocimiento de las difíciles condiciones en que trabaja la pequeña minería, lo que impide cumplir con la normativa vigente.
“Este acuerdo viene a apoyar al pequeño minero y a generar una cadena productiva más armónica, donde no sólo sea beneficiario el productor sino también los trabajadores. Lo más importante es que es voluntario, nadie obliga a nadie; buscamos que sea un ejemplo y hay productores y planteros que saben que hay una brecha grande por avanzar y ellos se ponen en primera línea para dar ejemplo a sus colegas mineros, que se puede trabajar de forma unida con el gobierno, para avanzar en mejores condiciones no sólo humanitarias sino laborales”, expresó la autoridad.
Finalmente, Patricio Gatica, presidente de CORPEMIN, expresó que están muy esperanzados en que la mayor cantidad de pequeñas faenas mineras y de plantas puedan modernizarse con el APL y actuar dentro del marco de la legalidad, cumpliendo con estándares adecuados en todos los ámbitos.
“Poder seguir avanzando paso a paso, cumplir los requerimientos con el apoyo y la tutoría de los servicios, hasta llegar a materializar la obtención de todos los permisos regularizados y así poder seguir aportando a las comunidades de donde somos y, en general, a la región. Es algo muy relevante porque la pequeña minería, como cualquier actividad económica, necesita tener un horizonte y una estabilidad de cúal va a ser su ámbito de acción y poder contar con los permisos que correspondan y cumplir con la normativa, de esa manera se puede pensar en crecer, en mejorar sus procesos, en definitiva se puede desarrollar en el largo plazo”, señaló el dirigente gremial.
Resultados esperados del APL
El sector de la pequeña minería genera en la región ventas de minerales, que son adquiridos en su gran mayoría por ENAMI, con montos anuales del orden de US$ 110 millones, dineros que ingresan a las diversas economías locales de la región.
Esto se ve potenciado al ser la actividad económica de mayor relevancia y con más potencial regional lo que implicaría poder optar a un crecimiento sostenido del 6% anual dado que existen las reservas que sustentan esto. Ese impacto se traduciría en aumentos importantes de ventas del orden de US$ 10 a 12 millones al año.
Se estima que el sector alcanza las 764 empresas, genera 6850 empleos directos y 2350 temporales o indirectos, y aporta el 5% al PIB Regional.
Sin embargo, su desarrollo eficiente requiere altos estándares de calidad para el cuidado del medio ambiente y sus trabajadores, aspectos que hoy no se cumplen en un gran porcentaje.
Es por ello que para aumentar la sustentabilidad del sector y continuar asegurando el asentamiento y permanencia de la población en regiones apartadas, el APL mejorará la seguridad laboral y las condiciones higiénicas y de habitabilidad de los asentamientos y plantas mineras.
Además, se fomentará la regularización de permisos y autorizaciones de manera progresiva, se incorporarán prácticas de eficiencia energética y se buscará la reducción del consumo de combustibles fósiles. Igualmente, se espera estimar la huella de carbono de las empresas y evaluar su reducción.
El APL considera también mejorar la gestión administrativa de las empresas y potenciará el desarrollo de sistemas tecnológicos asociados a la disminución y control de costos de la actividad.
