En un recorrido el diputado Matías Walker, el Gobernador de Elqui, Américo Giovine y el Alcalde de Vicuña, analizaron la situación luego de recibir la denominación de Zona de Catástrofe.
El Diputado Matías Walker junto al Gobernador de Elqui, Américo Giovine, acompañados por el alcalde de Vicuña, Rafael Vera, realizaron una visita a algunas de las viviendas dañadas en su totalidad por el terremoto del 16 de septiembre en la Región de Coquimbo.
La máxima autoridad comunal explicó que dentro de la desgracia que ha significado tener 300 casas con problemas dado el terremoto, Vicuña es la comuna menos afectada, sin embargo los vecinos merecen la ayuda que implica que este sector del Elqui sea considerado Zona de Catástrofe como se supo hace algunos días.
“Después de los esfuerzos de muchos, pero especialmente del diputado Matías Walker que fue a reunirse con el Ministro del Interior y consiguió el decreto de Zona de Catástrofe, nos sentimos acompañados, ya no nos sentimos solos” manifestó el edil.
El alcalde recalcó también que las fichas y visitas a las familias afectadas se hicieron desde el primer momento por parte del Departamento Social y la Dirección de Obras, “el esfuerzo de haber catastrado la comuna nos permitió ser Zona de Catástrofe, tal vez si no hubiésemos hecho ninguna ficha, si no hubiésemos catastrado a nuestros vecinos, jamás las autoridades hubiesen dimensionado el problema que tenía la comuna”, puntualizó.
En su visita a la comuna de Vicuña el Diputado Walker contó que había estado el pasado miércoles 29 de septiembre con el Ministro del Interior Jorge Burgos en La Moneda, con el objeto de pedirle extender la declaración de Zona de Catástrofe a toda la Provincia de Elqui, tras la conversación sostenida con el alcalde de Vicuña, quien le informó que en la comuna había un considerable número de viviendas dañadas.
Es así como el diputado Walker explicó la importancia de dimensionar en terreno los efectos del terremoto, “nosotros ahora vemos que detrás de esta Zona de Catástrofe hay personas de carne y hueso, vicuñenses que requieren un apoyo también por parte del Estado, estamos hablando de casas muy antiguas, algunas que tienen más de 150 años, que requieren no solamente un subsidio, requieren también recuperación patrimonial, queremos mantener estas lindas fachadas y para eso existen 5 subsidios dispuestos por la Presidenta de la República, ahora también se van a poder aplicar a la comuna de Vicuña, subsidios que van al orden de los tres millones a los 10 millones de pesos”, sostuvo el parlamentario.
El Gobernador de Elqui, Américo Giovine, señaló que era una necesidad que toda la Provincia de Elqui pudiera contar con este decreto de catástrofe, “aquí había una suerte de limitación, porque en la medida que no se conocía o no se tenía esta condición esto impedía que además se pudiera hacer el catastro como corresponde, cuando fuimos verificando la condición de Vicuña uno de los problemas era que por no estar en Zona de Catástrofe tampoco se podía verificar en forma consistente lo que estaba ocurriendo, a pesar de que el municipio derechamente ya había estado visitando especialmente los lugares que estaban afectados” manifestó la autoridad provincial.
Giovine agregó que existen varios instrumentos de ayuda para las viviendas afectadas que van desde la oportunidad de que le puedan ser retirados los escombros desde sus patios, hacer las demoliciones o demoliciones parciales con recursos de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), concurrir con recursos desde los subsidios habitacionales como también la instalación de viviendas de emergencia por parte del ejército.
Por su parte, Mario Rojas, vecino de Peralillo, y quien fue uno de los vecinos más afectados después del terremoto, se mostró muy agradecido por la visita de las autoridades y les mostró los lugares más dañados de su vivienda. “Las autoridades vinieron desde el primer día, la primera noche, el alcalde, Bomberos, Carabineros y las señoritas asistentes sociales que han venido también, por lo que estoy muy agardecido”.
Mario Rojas comentó que luego del terremoto y los daños que provocó, en su vivienda no tenían donde sentarse en el comedor y problemas con el baño, así como tampoco tenía agua. Con la ayuda de sus siete sobrinos que le enviaron dinero desde el norte, comenzó a reconstruir, “en el living comedor botamos todo el estuco y empezamos a poner malla” explicó.
