El día lunes 31 de agosto a las 18:00hrs se realizará una velatón al pequeño Ángel Márquez Zapata, el niño que fue hallado muerto en la localidad de Molina.
Una de las funcionarias que trabajó con el pequeño señaló a nuestro medio que en el Jardín Infantil “Pequeñitos del Valle”, ubicada en Panorámica con Arauco, en el sector de La Florida, realizarán una velatón es su memoria. La iniciativa ha sido ampliamente difundida por redes sociales e invitaron a todos los vecinos que quieran asistir a dar el último adiós al pequeño Angelito.
Las agresiones venían desde mucho antes.
La familia involucrada en este caso era conocida en el sector, el pequeño Ángel junto a otro de sus hermanitos estuvieron en el jardín el año 2014. En ese tiempo el niño llegaba regularmente con signos de haber sido agredido en diferentes partes del cuerpo, debido a esto la educadora y la asistente social denunciaron a la OPD de La Serena el caso.
No se hizo justicia.
Luego que la OPD se enterara del maltrato, se hicieron las primeras pericias pscicológicas a la madrastra y al padre, y con esto se logró que finalmente el caso se llevara a tribunales. Sin embargo, mayor fue la sorpresa de todos los presentes cuando la jueza a cargo del caso indicó que los padres eran aptos para mantener el cuidado del niño, a pesar que las instituciones demandantes mostraron como pruebas todas las constataciones de lesiones que se le hicieron al menor, y que indicaban claramente el maltrato. “En definitiva, la jueza se excusó en que la madrastra sufría un periodo de estrés, y por lo tanto ellos eran aptos para cuidarlo”.
La familia huye al sur.
Cuando el caso de maltrato se estaba dando a conocer y las entidades de protección junto a las encargadas del jardín seguían presionando para resguardar la integridad de Angelito, la familia huye al sur de Chile, sin tener noticias de ellos hasta ahora.
El sistema falló.
“Es una impotencia frente a la justicia chilena, en este caso nosotros hicimos todo lo humanamente posible, pero es el sistema el que falla; no sé si se colapsa o si hay muchos casos. No entendemos el porque no se llevó a un hogar (de menores) sabiendo el historial de maltrato del niño”, señaló la educadora.
El padre sabía del maltrato.
“El padre desde el año 2014 se enteró del maltrato que sufría por parte de la madrastra cuando tuvo que asistir a los tribunales. En ese tiempo cuando Angel tenía 3 años, el niño presentaba desnutrición, incluso la educadora le daba doble porción de alimentos y en ocasiones el pequeño esperaba a que sus compañeros dejaran las sobras para alimentarse”, agregó.
Lo que sufrió el niño no era maltrato, era tortura.
“Cuando el furgón que trasladaba a los niños llegaba al jardín, el pequeño Angel se aferraba a las piernas de las tías porque no se quería ir, era evidente el caso de maltrato en su hogar”, aseveró.
“Recuerdo que el niño un día llegó con un corte en la cabeza y tuvo que ser trasladado hasta el centro asistencial para que le pudieran cerrar con puntos, debido a que presentaba una herida de profundidad en su cráneo, en ese tiempo la madrastra dijo que el pequeño se había pegado en el medidor”.
“En otra ocasión el menor llegó con un ojo en tinta, y una de las últimas veces llegó con una de sus orejas quemadas por una plancha. Cuando constatamos lesiones, el médico que nos atendió dijo que el niño presentaba lesiones desde antes y que estas eran claramente signos de maltrato constante por parte de uno de sus cuidadores”, finalizó.
