- Un fuerte énfasis a los aspectos laborales, destacó el diputado de la región de Coquimbo, Francisco Eguiguren, respecto a la Cuenta Pública Presidencial.
Respecto a la reciente Cuenta Pública Presidencial, el diputado de RN de la Región de Coquimbo, Francisco Eguiguren Correa, indicó que «nuestro mandatario ha sido claro y preciso en que debemos avanzar hacia una Reforma Previsional más justa y completa para atender las necesidades de nuestros adultos mayores».
«Para eso, se requiere un gran acuerdo nacional del que nadie se pueda sustraer; voluntad y generosidad para dejar posiciones ideológicamente válidas, en pos de una solución integral e integrada, para el tema de las pensiones», comentó el parlamentario.
Eguiguren, destacó también que, en términos de las salas de cuna, «el Presidente ha sido claro y contundente al señalar que ninguna mujer trabajadora se quedará sin empleo por no contar con el beneficio de la sala cuna. Esto no sólo es una demanda social, sino que demuestra que la justicia social no es monopolio de la izquierda, sino que es patrimonio de todos los chilenos, que democráticamente buscamos soluciones precisas para problemas complejos como el de la inserción de la mujer en el mundo del trabajo».
El parlamentario agregó que «en el discurso presidencial ha quedado claro que la búsqueda de más y mejores empleos pasa por abrir oportunidades a quienes siempre han sido postergados en el mundo del trabajo: Las mujeres y los jóvenes. Han pasado décadas de los gobiernos de la Concertación y de la Nueva Mayoría y ello no ha podido ser resuelto. Ha llegado la hora de hacer cosas efectivas y no simplemente efectistas».
El diputado Eguiguren expresó que «tenemos un proyecto de trabajo para estudiantes y la ampliación del derecho a sala cuna. Después vendrán mejores regulaciones para compatibilizar trabajo y vida familiar a través del trabajo a distancia y la compatibilización de las jornadas en la empresa y en el hogar, especialmente, para la mujer trabajadora».
Por último, el diputado resaltó que «hay un planteamiento de fondo que cruza todo el discurso presidencial: Chile puede y debe ser un país desarrollado y los frutos del progreso deben llegar a todos los chilenos, pero eso no se logra por arte de magia. Para ello, se requiere paz social y oportunidades, con un claro combate a la delincuencia».