- El Intendente Claudio Ibáñez, informó que en menos de 24 horas se gestionó ayuda social para las personas afectadas por las pérdidas que dejó el temporal del fin de semana, mientras que los servicios públicos trabajan en las soluciones para recuperar la productividad de Tongoy.
36 mil 758 habitantes es la cifra oficial de afectados por el temporal de viento y lluvia, que dejó 2.292 damnificados en la Región de Coquimbo. Durante el fin de semana, los servicios fueron desplegados en todas las comunas por el Intendente Claudio Ibáñez, para monitorear los daños y coordinar las soluciones en todas las comunas, junto al Director Regional de Onemi, Rubén Contador.
La situación más compleja se vivió en las caletas de la región, y particularmente en las localidades de Tongoy y Puerto Aldea – con la pérdida y daños en más 140 embarcaciones de la pesca artesanal, donde la autoridad regional coordinó el trabajo para resguardar las naves en peligro por las intensas marejadas, con el apoyo del Ejército y de dos camiones grúa para agilizar el retiro.
En menos de 24 horas, llegó la ayuda social para las familias que se vieron afectadas por la pérdida de su fuente laboral, con 7.050 cajas de alimentos que se entregaron al municipio porteño para distribuirlas principalmente en las caletas de Tongoy, Peñuelas, Guayacán y Coquimbo.
“Ya recibimos 6.400 cajas de alimentación familiar que entregamos al alcalde Cristián Galleguillos para su distribución. Hemos logrado gestionar alrededor de $200 millones de pesos para atender las necesidades más urgentes, mientras seguimos trabajando con el equipo de gobierno y la comunidad en abordar y planificar las soluciones que nos ayuden a recuperar este importante sector económico, productivo y turístico para la región”, señaló el Intendente.
La preocupación de la autoridad regional también estuvo centrada en conocer los plazos de las empresas Aguas del Valle y Conafe, para dar respuesta a los problemas que presentan los servicios básicos, situación que mantiene a la fecha, según el último informe oficial, a 2 mil 269 personas sin suministro eléctrico y 5 mil clientes sin agua potable en varios sectores.
El Subdirector Técnico de Conafe IV y V región, Rodrigo González, explicando las razones del corte de suministro en varias zonas de la región, indicó que “cuando tenemos un evento climático de esta envergadura, con vientos de 98 a 120 Km/h, no hay sistema eléctrico que resista. Con vientos superiores a 70 Km/h ya aparecen daños importantes, aquí hubo caída de árboles que destruyeron redes y nosotros hemos tenido que hacer reconstrucción de esas redes en muchas partes”.
Por su parte, el Subgerente de Clientes Zonal Elqui de Aguas del Valle, Jorge Miranda, aseguró que “hoy estamos en todas las localidades, donde abastecemos, con suministro de agua potable, en la madrugada se entregó el servicio de forma definitiva en la localidad de Illapel”. Asimismo, puntualizó que ante un nuevo evento climático “estamos en coordinación con las autoridades, nuestro plan de contingencia funcionó, acortamos los tiempos de discontinuidad del servicio y también el número de clientes afectados”.
Sobre el balance del sistema frontal del fin de semana, el Intendente detalló que hay 33 albergados, 1.437 viviendas con daño menor, 45 con daño mayor y 2 con pérdida total. Mientras que los servicios básicos registran un total de 2.269 personas sin electricidad, 5 mil sin suministro de agua potable y 80 clientes sin servicio de telefonía móvil.
Anuncio de lluvias
Según la Dirección Meteorológica de Chile nuevas precipitaciones afectarán a la región de Coquimbo a partir de la noche del martes y hasta la madrugada del jueves de esta semana, con un fenómeno post frontal que se denomina núcleo frío en altura. Al respecto, el Intendente Ibáñez, realizó un llamado a la población a tomar las precauciones necesarias para enfrentar las próximas precipitaciones que se esperan, con mayor intensidad, para este miércoles 12 de agosto.
Al respecto, el Director Regional de ONEMI, Rubén Contador, manifestó que “lo importante es informar a la ciudadanía que vamos a entrar en otro evento meteorológico, no tan intenso como el que acabamos de vivir, para mantenerse alerta y con la cultura preventiva que siempre hemos indicado”.