No podemos dudar que las parrillas a carbón son las más populares y recomendadas por los asadores dado que el sabor ahumado no se puede conseguir con las de gas. Si todavía no cuentas con una parrilla en tu casa y estás deseando comprar una, pero no sabes cuál, este artículo te va a ser de mucho interés.Cuando pensamos en un asado, lo primero que se nos viene a la mente son recuerdos con amigos y familiares al aire libre, disfrutando del buen clima, charlando junto a la parrilla a carbón. Es un ritual que atraviesa fronteras y son cada vez más las personas que deciden ser anfitriones y poner la carne al asador. Ahora bien, ¿te imaginas ese mismo recuerdo con una parrilla a gas? Podría ser una opción, más que nada si eres principiante en “prender el fuego”.
5 razones para elegir la parrilla de carbón
- El sabor: este estilo de barbacoas le aporta a la comida un sabor ahumado único que no se puede reemplazar fácilmente.
- Variedad de opciones: gracias a la gran cantidad de modelos, se adaptan a distintos espacios. Incluso se pueden colocar en pequeños balcones. Además, hay modelos con rueditas y livianos lo que facilita su guardado y transporte.
- Combustible barato y fácil de encontrar: una vez que aprendes a hacer el fuego, hacer un asado es algo muy sencillo de resolver más que nada porque sólo necesitarás carbón que es muy fácil de encontrar y más económico que el gas.
- Modelos para camping: dependiendo de los usos que les des también hay modelos muy chicos y fáciles de armar ¡ideales para un almuerzo al aire libre mientras viajas! Al ser un producto tan popular, la oferta es muy diversa por lo que los precios también. Hay para todos los presupuestos.
Fácil mantenimiento: La limpieza de estas parrillas es más que sencilla, sólo vas a necesitar un cepillo metálico para poder retirar restos de comida y de grasa. Además, cuando no la uses deberás resguardarla del frío y la lluvia por lo que deberás cubrirla con una funda protectora.
Gas Vs. Carbón
Como bien lo indica el nombre de cada una, su principal diferencia es el “combustible” que utilizan para cocinar. Las parrillas a gas son las elegidas por quienes prefieren regular la temperatura y cocinar más rápido. Muchos consideran que el hecho de que no produzcan humo es una de sus mejores ventajas. Además pueden ser usadas en espacios cerrados por lo que son ideales para departamentos o casas sin jardín. Ya hemos mencionado las ventajas más importantes de tener una parrilla a carbón, por lo que como desventaja podemos mencionar que al sólo poder usarse al aire libre se dificulta comer un asado a bajas temperaturas. Además, suele demorar mucho más tiempo cocinar con este tipo de barbacoas y la temperatura se va regulando con la experiencia (no hay una perilla para indicar la temperatura deseada).
A modo de resumen, podemos decir que ambas parrillas son una buena opción. Va a depender del uso que le quieras dar, cuál es la mejor para vos. Tenés que tener en cuenta el espacio donde la vas a utilizar, dónde la guardarás y resguardarás del clima, y el presupuesto que quieras destinar en esta compra.
Evaluando todos estos factores, sin duda tu nueva parrilla va a ser la perfecta para vos y tu familia. Tus amigos van a desear estrenarla con vos el fin de semana y, seguramente, en esa reunión tengan más de un tip de cocina para recomendarte.
